La era de Sampaoli al mando de la selección comenzó con una victoria por uno a cero frente al clásico rival Brasil en un partido amistoso que se disputo en Australia.
La Selección comenzó con el pie derecho y, pese a que fue de carácter amistoso, siempre es mejor empezarlo con una victoria para ir afianzando los conceptos y la idea de juego que quiere el DT. La primera formación que utilizó fue un 3-3-3-1: Romero; Otamendi, Maidana y Mercado; Gómez, Biglia, Banega; Di María, Dybala y Messi; Higuaín.
El primer tiempo de la Argentina fue relativamente bueno, por momentos se pudo visualizar una de las ideas de juego que tiene el DT: la presión bien alta en campo rival para recuperar la pelota rápidamente. Además, determino el control del balón en todo momento con jugadas de pelota al piso, sin pelotazos y sobre todo con la salida por abajo, que a los cinco minutos del partido comenzó con el arquero y, luego de varios pases, Di María se colocó en posición de gol y estrello un remate en el palo.
Por otro lado, cabe destacar que al utilizar dicho esquema de juego muchas veces el equipo rival supo romper la defensa con transiciones rápidas en donde los jugadores argentinos llegaban tarde. A pocos minutos de finalizar el primer tiempo, La Albiceleste logró abrir el marcador a través de una pelota parada que luego de un cabezazo de Otamendi que colocó un remate en el pal, Gabriel Mercado pudo definir con el arco vacío.
Melbourne, Australia
Brasil vs Argentina en el estadio MCG (Melbourne Cricket Grond).
FOTO GERMAN GARCIA ADRASTI / Enviado Especial
El segundo tiempo nada de parecido tuvo al primero. Brasil fue ampliamente el dominador del partido y erró una cantidad inmensa de situaciones de gol que, por mala fortuna o mala definición como en la jugada de Gabriel Jesús, no pudo quebrantar el arco argentino. Además, la cantidad de modificaciones que se realizaron durante el juego hizo que se parara constantemente el partido y fuera perdiendo el ritmo.
Cabe destacar que, se arrancó de buena manera y la renovación del equipo se pudo visualizar con nombres nuevos como el de Maidana, Guido Rodriguez, Correa, Gómez y una mención especial para Nicólas Tagliafico, capitán de Independiente, que jugó casi todo el segundo tiempo y su rendimiento fue el adecuado.