Miércoles de sesión en el Congreso. El día que la paridad en la listas legislativas se convirtió en ley, nosotros viajamos para entrevistar a la diputada nacional, Luana Volnovich, que ocupa este rol desde el año 2015 y en las últimas semanas ha ocupado un papel importante en la tarea de esclarecer el verdadero objetivo de la reforma previsional anunciada por el gobierno nacional.
¿Cual es el verdadero trasfondo de la reforma previsional?
La reforma previsional no es una reforma, la llaman así en un intento de plantearla como algo positivo que viene a mejorar una ley existente, que viene a reformar para bien. La realidad es que la reforma no es otra cosa que una serie de medidas – en el caso de la reforma previsional es un proyecto de ley – que vienen a realizar un nuevo ajuste al bolsillo de los trabajadores, un ajuste a los jubilados. Es muy importante para comprender la reforma, entender cómo el gobierno nacional avanza y va construyendo el marco de posibilidad material, subjetivo, los consensos en la cámara de diputados y en la ciudadanía para ir generando las condiciones que le permitan hacer realidad una reforma que es tan perjudicial para todos los argentinos.
La realidad es que nosotros viendo los números vamos a ver que es perjudicial, y sin embargo, vemos cómo esta construcción en varios momentos – obviamente con el trabajo sucio de los medios de comunicación – genera un marco de posibilidad para el avance de las reformas. La reforma previsional empieza con la ley de reparación histórica que fue en el año 2016. Cada uno de los avances que el gobierno hace en detrimento de los derechos siempre tiene una misma metodología: se plantea en la tapa de los diarios como un “beneficio” a la ciudadanía y la trampa que es todo lo que viene atrás.
Esto está ocurriendo en etapas. La primer etapa fue la ley de reparación histórica, que fue el andamiaje normativo necesario para ir amasando la segunda etapa que es en la que estamos hoy y se busca avanzar en una tercera etapa que es la reforma previsional total, que sería una variante de la AFJP. La ley de reforma previsional que fue ingresada en el Congreso propone la modificación de la fórmula de movilidad jubilatoria, eso tiene un objetivo y es ahorrar dinero por parte del Estado. La fórmula de movilidad hace que dos veces por año se reajusten los haberes de los jubilados, siempre por encima de la inflación. Es decir, está fórmula hace que cobren cada vez más.
En cambio, la prioridad ahora es pagar la deuda externa y proponen que los haberes de los jubilados, asignaciones universales y las pensiones de los veteranos de guerra, se ajusten por inflación. Desde 2008 los haberes jubilatorios aumentaron un 950% y con esta nueva ley, no hay ningún indicador de inflación que pueda generar ese aumento. Es decir, se cobra siempre lo mismo, sin importar cuantas veces al año se ajuste. En ese sentido, frente al rechazo popular, el gobierno nacional en otro acto de cinismo decidió hacer el ajuste de haberes por el aumento anual del PBI, ¿esto qué significa? Desde gobierno dicen nosotros en junio te vamos a dar un aumento y para generarlo lo que hacen es tomar en cuenta el aumento del PBI. Es decir, si el PBI crece el 10% – no hay ningún PBI que crezca eso pero como ejemplo – vamos a agarrar el 5% de eso y lo vamos a dar de aumento a los jubilados. En los cálculos, con un aumento del PBI del 10% el aumento puede ser de 10 pesos, 20 pesos, es una burla. Ese es el aumento verdadero.
No sólo es un problema para los jubilados de hoy sino que genera una perspectiva del sistema previsional para los próximos años y nuevamente acá aparece el gobierno y como presenta a la sociedad o a los diputados para que se vote, siempre hacen la carnada y acá la carnada es el 82% móvil. Ellos utilizan eso porque está instalado en la sociedad como un reclamo. Nosotros con el sistema previsional que estructuró Amado Boudou le pagamos a la mayoría de los jubilados el 81,7%, es decir todos los jubilados que cobran la mínima, cobran el 81,7% del salario mínimo vital y móvil. Entonces este 0,3% que ellos te ofrecen como aumento son 19 pesos. Esto tiene que ver con esa forma de construir sentido y confundir el relato de lo que se trata la reforma, la realidad es esa, cobras cada vez menos y a un grupo de jubilados solo le aumentaron 19 pesos.
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¿Cual es tu visión acerca de las tres reformas que fueron presentadas?
El gobierno tiene una necesidad económica para trasladar esos recursos a la deuda externa responden a una visión del Estado con una matriz liberal. La reforma tributaria y la laboral, lo que hacen es reasignar impuestos que hoy se asignan al sistema previsional a otros fines – uno que tomó público conocimiento es el fondo del conurbano – la gobernadora María Eugenia Vidal, le dijo al presidente Macri que quería el fondo del conurbano y lo que hicieron fue quitarle el 20% de impuesto a las ganancias que iba al ANSES para dárselo al fondo del conurbano. Hoy hay un sector muy vulnerable que son los jubilados, que son los más débiles y son claramente la caja que va a financiar el ajuste de esta etapa.
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¿Crees que es un paso importante la postura que han tomado desde algunos sectores de la CTA y la CGT en las últimas semanas?
Eso es lo que va a definir el destino de todos los argentinos, de los jubilados y de los trabajadores de mañana. Los trabajadores han tomado el tema de la reforma previsional como algo propio, como una consigna propia. Yo no tengo dudas que sólo va a ser la movilización de ciertos sectores de la CGT y de la CTA lo que verdaderamente nos permitan generar condiciones para frenar la reforma, si no se genera esa masa de trabajadores presionando en la calle es factible que la reforma pase rápidamente.
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¿Cómo crees que va a ser el panorama político en el Senado con la presencia de Cristina?
Cristina es, no sólo, la que puede generar un ordenamiento y tracción en la dirigencia política para juntar la fuerza, sino también la que puede generar fuerza para el afuera, es decir, la convocatoria a la ciudadanía. Yo creo que la matemática no es cuantas manos levantemos, hoy la matemática es cuantas manos estén en las puertas de afuera del Congreso Nacional. Es el diagnóstico de cómo está la situación de ciertos sectores de la dirigencia política, por lo menos dentro de la cámara de diputados, están los diputados que desoyen los mandatos populares y eligen oír los mandatos del poder. Esa es la situación en la que nosotros estamos.
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¿Cuál es el objetivo que tienen como espacio político para el 2019?
Hoy hay una persecución política muy importante, el objetivo es ejercer el pleno derecho democrático y el mandato popular, que parece algo obvio pero no lo es. Hay toda una situación de persecución política y extorsión que pervierte la calidad de la democracia y el funcionamiento del Congreso Nacional. La expectativa nuestra es tener un bloque que pueda tener el equilibrio entre la unidad y la convicción, porque pareciera ser que en la política para mantener la unidad tenes que ser flojo, tenes que ser amplio en las ideas y eso significa tener que bajar algunas de las reivindicaciones. Eso es algo que desde el 2015 sucede.
El bloque ha funcionado y con Cristina tenemos confianza y expectativa de que será más fácil lograr un bloque lo más amplio posible pero sin renunciar a ninguna de las banderas y de las convicciones. Después el objetivo es tener el poder de convocatoria en la ciudadanía porque esto recién empieza, estamos en una etapa de ir frenando los avances del gobierno, pero hay que respetar el mandato popular porque el presidente ha sido votado y elegido. A su vez, creemos que hay algunos mecanismos relacionados a esta ciudadanía televidente y que vota en torno a una posverdad. Nosotros vamos a intentar ser la voz de los sectores que, de alguna manera tienen esa memoria histórica de los doce años de kirchnerismo. No vamos a dejar de alzar la voz cuando intenten llevarse puesto los derechos de los últimos doce años.
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Sabemos que Unidad Ciudadana sacó un buen porcentaje en Berazategui ¿Como ves este apoyo en el distrito al cual perteneces?