Hace unos meses la empresa Cambridge Analytica fue protagonista de un escándalo internacional al confirmarse que utilizó la información de 50 millones de usuarios de la red social Facebook. Con esos datos generó anuncios políticos dirigidos para favorecer la campaña presidencial de Trump así como para el Brexit del Reino Unido.
La consultora británica se encargaba de la minería de datos y a su análisis para la creación de campañas publicitarias y políticas. El haber robado la información de estos usuarios implica una violación a las políticas de uso de la red social Facebook y sus “términos y condiciones”.
«Explotamos Facebook para acceder a millones de perfiles de usuarios. Y construimos modelos para explotar lo que sabíamos de ellos y apuntar a sus demonios internos. Esa era la base sobre la cual la compañía se fundó». Afirmó Christopher Wylie, ex empleado de Cambridge Analytica, en declaraciones a los medios New York Times y The Guardian.
El sistema para la obtención de los datos fue ideado por Aleksandr Kogan, profesor de la Universidad de Cambridge, mediante una aplicación llamada This is your digital life la cual funcionaba como un test on line. Se les pagó a los usuarios una suma de dinero para que accedan al cuestionario sobre sus intereses políticos.
Para completarlo se requería iniciar sesión en Facebook y otorgarle algunos permisos a la app, como recoger información sobre la actividad del usuario, acceder a la ubicación y a los contactos en la red. Unos 270 mil perfiles hicieron esta encuesta online, lo cual derivó en la recopilación de información de 50 millones de perfiles. Esa aplicación pudo acceder a los me gusta y el perfil de los que respondían la encuesta y así recolectó los datos personales de ellos y sus amigos.
Con toda esta información robada sin consentimiento se diseñaron campañas políticas y publicitarias para millones de personas, detalladamente segmentadas para sus gustos.
Al parecer este escándalo tuvo su anclaje en Argentina, dado que se le consultó en el parlamento británico a Alexander Nix (CEO de Cambridge Analytica) si habían realizado trabajos en América Latina y él respondió haber trabajado en nuestro país, aunque no quiso revelar el nombre del cliente. El presidente de la Comisión de Asuntos Digitales, Cultura, Medios y Deporte del parlamento británico, Damian Collins expresó “estoy viendo una nota que alguien compartió conmigo de una reunión del grupo SCL (empresa madre de Cambridge Analytica) del 27 de mayo, donde hay una nota que dice <campaña anti-kirchnerista y presentada al tomador de decisiones, esperando devolución>”.
Collins insistió: “Pero para ser claro. Las reuniones giraban alrededor de la premisa de una campaña anti-kirchnerista, entonces estaban trabajando para un partido de la oposición u otra persona interesada en influenciar la política en Argentina, que no estaba apoyando al Gobierno”. Nix no tuvo más remedio que aceptar que esas pruebas daban indicios de la campaña realizada en nuestro país pero negó que su cliente fuera Paul Singer, dueño del fondo de inversión de alto riesgo Elliott Management Company y unas de las firmas más famosas en el planeta señalada como «fondo buitre».
Hoy en día casi todas las app´s que descargamos a nuestro celular nos invaden en nuestra privacidad, pero también es cierto que la única forma de no aceptar ese hecho es no perteneciendo a tal red o el no utilizar tal aplicación.
Las redes sociales juegan hoy en día un papel muy fuerte, y muchas veces con campañas moldeadas a nuestro gusto, lo que en algún punto nos genera un micro clima, del cual no podemos salir (y a veces tampoco queremos).