A través de la Resolución CFE 340/18, firmada por los ministros de Educación en mayo de este año, se acordó que «se organice un equipo docente referente de Educación Sexual Integral» con un enfoque interdisciplinario. Se busca que sea un proyecto institucional de cada establecimiento.
En la resolución se aprobó:
1- Llevar adelante acciones que aseguren el cumplimiento de un espacio específico de ESI en la Formación Inicial de quienes se forman como docentes priorizando el nivel educativo.
2. Establecer que se incluya un enfoque integral en los planes institucionales de manera transversal o a través de espacios curriculares específicos.
3. Incluir en las evaluaciones a todos los docentes del país contenidos de Educación Sexual Integral en los concursos que se realizan en el marco de ascensos.
4. Garantizar la realización de las jornadas «Educar en Igualdad» para la prevención y erradicación de la violencia de género. Elaborado en base al Programa Nacional para la eliminación de violencia en la Ley 27234.
Esta capacitación será masiva y se desarrollará en CABA,Mendoza, Trelew, Tucumán y Neuquén en las que participaran alrededor de 500 personas, entre las cuales estarán un directivo de cada colegio junto a dos docentes.
Luego de la sanción de la Ley de Educación Sexual Integral en 2006, se diseñó una capacitación docente en 2008. Hasta 2012 era virtual, pero con el tiempo se volvieron multitudinarias y presenciales. Se realizaban durante tres días y concluían con una Jornada Institucional con acciones a replicar. En 2012 participaron 12 mil docentes y, durante 2015, se llegó a un pico de 55 mil.
Hasta ahora, las acciones concretas son sin presupuesto estatal, excepto por un pequeño porcentaje en las escuelas: $7.10 por alumno. A diferencia de lo que entienden los «anti derechos», hablar de educación sexual no es adoctrinar, es educar. Se trata de una ley que, en su primer artículo, sostiene que: «Todos los educandos tienen derecho a recibir educación sexual integral en los establecimientos educativos (…) entiéndase educación sexual integral la que articula aspectos biológicos, psicológicos, sociales, afectivos y éticos».
Este año, el Programa Nacional de ESI cuenta con menos de la mitad de los recursos con los que contaba antes de la asunción de Mauricio Macri, sufriendo como todas las políticas referidas a género, un desmantelamiento atroz.