El sindicato de trabajadores del ANSeS (SECASFPI) criticó duramente las políticas que se implementan desde la administración de Mauricio Macri al recordar que emitió Letras del Tesoro por 86 mil millones de pesos, que fueron colocadas totalmente en el Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS) del sistema previsional argentino. “No les alcanzó con endeudarnos, este gobierno financia el tesoro desfinanciando al ANSES y no para”, indicó su Secretario General, Carlos Ortega.
El gremio también criticó a la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, por él uso del FGS: “en diciembre también colocó tres bonos por unos 28 mil millones de pesos. Y en enero, otros 10 mil millones de pesos a una tasa ridícula: 12% anual, cuando cualquier banco estaría cobrando al menos 50%. Si eso no es un robo, que me expliquen cómo se llama”, argumentó Ortega quien integra la Corriente Federal.
El sindicalista señaló que al momento de su creación, en el año 2008, el FGS del sistema previsional argentino, “era de unos 28 mil millones de dólares y cuando asume Macri, en 2015, lo recibió con más de 50 mil millones de dólares. En tres años de gobierno de Cambiemos se esfumaron 10 mil millones de dólares y hoy apenas supera los 40 mil millones, con el agravante de que ni siquiera se utiliza con el espíritu de herramienta contracíclica con el que fue creado: los créditos productivos, que en definitiva retroalimentan el sistema de aportes, cayeron del 13 al 7%; mientras que los créditos personales a los jubilados, y a los que se les cobra intereses, crecieron del 2 al 9%. Lo peor de todo es que este gobierno endeuda a los jubilados con su propio dinero para que puedan pagar los remedios o servicios esenciales como lo son la luz, el gas, la electricidad y el agua. Parece un chiste”, ironizó el gremialista
“La primera rapiña que hizo el gobierno de Macri al FGS fue incluir un artículo en la Ley de Reparación histórica donde decía que para ese cometido el Estado podía vender acciones del FGS, e incluso el actual acuerdo con el FMI prevé lo mismo. Así, no sólo se está dilapidando el dinero aportado por los trabajadores, sino que se quiere correr al Estado de los directorios de las empresas para las cuales trabaja este gobierno”, finalizó Ortega.