Decretaron la cuarentena. Es para evitar la propagación de un virus. Ella tembló. Estar encerrada 24 horas con una pareja violenta no es lo que tenía pensado. Esta vida no es la que tenía pensada. Ya no sabrá cómo actuar para que su ira no se desate. Ojalá alguien escuche y tenga la valentía de salvarla. Porque ella tiene miedo. No tiene fuerzas. No tiene autoestima. ¿Y si se queda callada? Quizás si esta vez no dice nada que lo moleste. Quizás esta vez cambie y puedan encontrar otra manera de relacionarse. Pero se calló el balde con todos los elementos de limpieza, no compró el queso que le gusta. Y comenzaron los gritos. Ella esta vez respondió. Pero él es más fuerte. Y la cara le duele. Y le da vergüenza. No tendría que contestar. Estúpida, para que contestaste. Los hijos lloran, ella los calma. No pasa nada, ya se le va a pasar. Pero nunca se pasa. Quizás alguien la escuche y la salve.
Ante la posibilidad de un incremento de casos de violencia por motivos de género que las situaciones de aislamiento forzoso pudieran traer aparejadas, el Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad de la Nación (MMGyD) tomó una serie de medidas integrales a fin de garantizar una respuesta eficiente a la demanda que pudiera generarse.
En primer lugar, se reforzó el equipo de atención y se crearon nuevos canales de comunicación con la Línea 144, a sabiendas de que muchas veces, en aislamiento puede dificultarse la realización de un llamado telefónico. A partir de ahora, las personas en situación de violencia también pueden comunicarse vía WhatsApp y correo electrónico. En el primero de los casos, a través de los números 11-2771-6463, 11-2775-9047 y 11-2775-9048 y por mail, escribiendo a linea144@mingeneros. El equipo de atención es interdisciplinario, formado por abogadxs, psicólogxs, trabajadorxs sociales, y profesionales de otras disciplinas capacitadxs para abordar integralmente las consultas y se trabaja articulando recursos y acciones con organismos del Estado nacional, provinciales, municipales, de la CABA y organizaciones comunitarias y de la sociedad civil.
Además de estas vías de contacto, se encuentra disponible para descargar la aplicación gratuita para celulares tanto para dispositivos Android como iPhone a través de la página web del ministerio.
La vida sin violencia es un derecho. Gran parte de la discriminación que se ejerce contra la mujer tiene lugar en el propio domicilio de la mujer y proviene de su marido, sus familiares y su comunidad.
La Asamblea General de las Naciones Unidas en 1993, define la violencia contra la mujer como “todo acto de violencia basado en el género que tiene como resultado posible o real un daño físico, sexual o psicológico, incluidas las amenazas, la coerción o la privación arbitraria de la libertad, ya sea que ocurra en la vida pública o en la privada”
Según un estudio de la UNESCO una mujer puede llegar a tardar once años en denunciar a su agresor con el que mantiene un vínculo. Pero en estos días de encierro, si escuchas gritos, llantos o amenazas vos si podés salvarla. Quizás esta cuarentena nos obligue a estar más atentos a ciertas señales, porque el coronavirus no es la única pandemia.