«Laburo mas que antes, me escriben a cualquier hora y me da cosa no contestar.»
«Hay una sola computadora en casa y nos dividimos con mis hijos que la necesitan para el colegio.»
«Ahorrarme el viaje esta bueno, pero si tuviera la opción hoy no se que elegiría.»
Frases como estas son cada vez mas habituales en conversaciones que sobrevuelan la adaptabilidad de la vida laboral y familiar al contexto actual. A casi tres meses del inicio del ASPO (Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio), podemos afirmar que varios aspectos del funcionamiento social se han modificado a lo largo de esta etapa. En el terreno de lo laboral, algunas tareas continuaron su operatoria casi sin modificaciones en lo cotidiano. Otros rubros no corren la misma suerte y han tenido que detener por completo su trabajo. Algunos han llegado a reconvertir su actividad para subsistir ofreciendo productos o servicios que no tiene que ver con su actividad principal.
Distinto es el caso de una enorme cantidad de trabajadorxs que tuvieron que trasladar su trabajo de la oficina a sus hogares, adaptando el nuevo espacio físico en la medida de lo posible. El teletrabajo se impuso necesariamente en el día a día de millones de argentinos y argentinas. Por esto, en el Congreso se han apurado varias iniciativas cuyo objetivo es regular el home office, teletrabajo, o trabajo a distancia.
Comienza el juego en Diputados
La Comisión de Legislación del Trabajo, presidida por la diputada Vanesa Siley, tiene agendada la primera reunión informativa para este martes 16 de junio. La dinámica del encuentro va a consistir en que los legisladores y las legisladora que integran la Comisión escuchen a los distintos representantes sindicales invitados. Formarán parte de la reunión integrantes de la CGT y de las dos CTA, además de diversos gremios relacionados de una forma u otra a las telecomunicaciones, como SATSAID, FOETRA y APsee, entre otros.
El miércoles 17 se coordino otro encuentro de carácter informativo con el ministro de Trabajo de la Nación, Claudio Moroni.
En total se presentaron 14 proyectos de ley para regular el teletrabajo, de los cuales 10 provienen del oficialismo y 4 de la oposición. La intención de la Comisión es que uno de los dictámenes obtenga las firmas de todos los bloques y pueda ser debatido en el recinto.
Proyectos en danza
El Numeral accedió al proyecto presentado por la diputada Claudia Ormachea, quien también es secretaria de Género, Derechos Humanos e Igualdad en el sindicato de empleados bancarios que conduce Sergio Palazzo. Este es tan solo uno de los 14 que fueron presentados durante este periodo.
En el mismo, están contemplados varios aspectos que habitualmente son un punto de conflicto entre empleadores y trabajadores a la hora de la implementación de esta nueva modalidad:
- Igualdad entre presenciales y teletrabajadores: El texto establece claramente que el trato en términos laborales, salariales y de derechos será igual entre trabajadores que acuden de forma presencial en relación a quienes trabajan desde la casa. No podrá existir perjuicio alguno con aquellos que elijan la modalidad a distancia.
- Equipamiento y conectividad: Los equipos con los que el trabajador lleve adelante sus tareas deben ser provistos por el empleador. En ningún caso las empresas podrán exigir que el empleado utilice sus propias herramientas para llevar adelante el trabajo. También se establece que los gastos de conectividad corren por cuenta del empleador.
- Derecho a desconexión: El trabajador puede desconectarse en el horario que no corresponda a su jornada laboral. A su vez tiene derecho a ignorar las comunicaciones o indicaciones recibidas en este lapso. Por otra parte, el empleador tiene prohibido remitirle comunicaciones fuera del horario convenido previamente.
- Reuniones presenciales periódicas: El empleador debe proveer periódicamente un lugar físico en el cual tanto los empleados que realizan teletrabajo como los que eligen no hacerlo se reúnan. Se deberá informar al sindicato de la actividad, quien podrá designar los representantes que crea adecuados para asistir.
Regular en cuarentena
La urgencia por elaborar una iniciativa que le de un marco legal al teletrabajo claramente tiene que ver con el exponencial crecimiento de esta modalidad. El establecimiento del ASPO hizo que solo los trabajadores esenciales pudieran salir de su casa a trabajar. Con esto, las empresas que no encuadran en esas categorías elaboraron de apuro esquemas de trabajo con mayores o menos contemplaciones, según el caso.
En este contexto, reaparecieron en empleos registrados preocupaciones relacionadas a un posible avance sobre los derechos de los trabajadores que ahora prestan tareas desde su hogar. La flexibilidad que ofrece el home office puede seducir inclusive a los empleados, por eso resulta indispensable un marco regulatorio consensuado entre Estado, sindicatos y empresas.
El universo de aplicación de máxima de esta modalidad ronda el 60% de los empleos, según un documento elaborado por CIPPEC en abril. En ese mismo informe se señala el atraso tanto de los hogares como del aparato productivo en términos tecnológicos. También se afirma que «un 40 % de los trabajos no tiene ninguna posibilidad de realizarse de forma virtual».