Los feminismos arrastran consigo, muchas veces, el valor de las cosas y sus reivindicación. Feminismo reparador, que reconstruye todo lo que conocimos y vivimos hasta hoy. Un feminismo que abra las puertas de la sororidad, de la verdadera empatía. Que nos hace preguntarnos y entender las asimetrías, los roles de poder, hasta nos lleva a cuestionarnos el propio seno de nuestro hogar.
En el marco del Día Internacional de la Eliminación de las Violencias contra las Mujeres conversamos con Belén Marón, mujer, joven, feminista, co-directora de la Revista Combativas, una de las responsables del Observatorio de Políticas de Género de la Provincia de Bs. As., de IDEAL Quilmes y la directora de Política de Género en Quilmes.
Con toda una historia detrás de militancia y de pensar a la política como una herramienta transformadora y al feminismo como algo que llegó a nuestras vidas para quedarse, Belén dialogó con El Numeral.
¿Cómo trabaja el Observatorio de Género? ¿Cuál es el principal objetivo?
El objetivo principal del Observatorio provincial de políticas de Género era elaborar estadísticas sobre femicidios en la provincia de Buenos Aires. Tiene dos años, en su momento fue una decisión política de Mayra Mendoza porque no teníamos datos, no existían. Lo que hacemos es abordar mediante los medios de comunicación -provinciales y locales- los casos de violencia. Los números son escalofriantes.
Hoy el objetivo es que sea una herramienta para todes y que se puedan diseñar políticas para toda la provincia, por distritos. Por ejemplo, cuando ves que hay un distrito que encabeza en cifras, nos acercamos y damos datos que quizás ellos no tienen. No nos basamos en carátulas, sino que analizamos y recopilamos información.
¿Qué políticas crees que son esenciales para eliminar la violencia de género?
Creo para erradicar la violencia es esencial empezar a trabajarlo desde chiques. Esta cultura que estamos tratando de combatir se pueda dar vuelta con la ESI y desde la casa principalmente. Creo que las generaciones venideras, la verdadera revolución de las nietas, va a poder combatir la violencia y quizás, por qué no, desarrollar política para que la violencia no se reproduzca y acompañe a las niñeces en todo su recorrido.
Te puedo dar el ejemplo de Quilmes donde ahora tenemos una Secretaria de Mujeres y Diversidades por decisión política de la intendenta Mayra Mendoza. Antes, era una dirección general. En el año 2018 y 2019, relevamos en nuestro Observatorio de Políticas de Género que hubo 5 y 6 femicidios respectivamente. Hoy en todo el año no hubo ningún femicidio.
Creo que también son decisiones políticas. Hoy Quilmes en plena pandemia, cuando sabemos que se acrecentaron las violencias, estuvo presente, a la altura de las circunstancias llamando y conteniendo a todas las mujeres y diversidades que han pasado alguna vez por la Secretaría. Entonces, si hay decisión política y hay compañeras a la altura como la secretaria, todas las directoras y, obviamente, nuestra intendenta… hay cosas que se pueden modificar.
Hoy Quilmes en plena pandemia, cuando sabemos que se acrecentaron las violencias, estuvo presente, a la altura de las circunstancias llamando y conteniendo a todas las mujeres y diversidades que han pasado alguna vez por la Secretaría.
Hicimos bastante, pero obviamente la pandemia nos neutralizó en ciertas cosas. Por ejemplo, llegar a los barrios como quisiéramos. Pero sí, quizás durante el macrismo, hemos creado redes feministas. Sabemos donde tenemos una compañera en cada barrio, sabemos a donde podemos acudir, sabemos cómo llegar a las vecinas porque también tenemos una esencia militante que nos salva y que ponderamos día a día.
¿Qué políticas destacas?
Creo que la Ley Micaela que es muy necesaria. Creo que es la base para formar a todes, en cualquier lado que estén. Así sea Cultura, Educación, Justicia o Seguridad. Necesitamos perspectiva de género no solo para tener empatía, sino también para pensar en el otro y ser mejores personas. Creo que el feminismo también nos hace buenas personas, a los varones también. Que un varón entienda un poco lo que le está pasando a su alrededor y a sus compañeras, no sepa como abordar un caso de violencia pero sepa a quien acudir, creo que es sustancial. Y creo que simplemente a lo largo y a lo ancho del país, la Ley Micaela es importante para ser mejores personas.
Las políticas como el Acompañar o el Cupo Laboral Trans son políticas reparadoras. Siempre decimos que somos la voz de quienes ya no están y creo que con estas políticas somos la voz de Diana Sacayán, Lucia Perez, Micaela y de tantas más.
Es reparador saber que el Estado está ahí, presente. Creo que solo con un gobierno peronista y feminista se puede lograr. Lo estamos haciendo y creo que es para celebrarlo.
¿cuán importante es el movimiento feminista para este presente?
El movimiento feminista sentó un poco las bases de lo que fue el feminismo quizás del 2015 o quizás cuando todas despertamos. O, al menos, cuando yo desperté. Ahí cuando te das cuenta de que todo lo que está alrededor es totalmente injusto, cuando sentís que todo el sistema está mal. Pero, te encontras con compañeras que hoy quizás son amigas, hablando en términos meramente personales. Creo que si no nos hubiese atravesado el feminismo como nos atravesó hace cuatro, cinco o seis años, la pandemia la hubiésemos pasado mucho peor. En la pandemia demostramos que somos un colectivo dinámico y recontra sororo. A mi la palabra sororidad me gusta, pero creo que se está banalizando.
Hoy sabes que podes ir a una farmacia y en clave decir «QUIERO UN ARBIJO ROJO» y que a otra persona entienda que estás sufriendo violencia de género.
Atravesamos distintos lugares como los medios de comunicación; los abusos, como ocurrió con Thelma Fardín que fue un punta pie para que muchas personas denuncien; o permitirnos hablar del goce, como lo hace Luciana Peker. Superamos barreras que creíamos impensadas y vamos por más. Creo que desde la multisectorialidad vamos a intentar ganar derechos, ir por una verdadera igualdad por la que tanto luchamos.
¿Crees que es importante que las mujeres ocupen más espacios de jerarquía? ¿Qué implica?
Es importante que ocupemos lugares de jerarquía principalmente porque si no está la voz de ninguna compañera no hay voces que nos representen. Quiero hacer un paréntesis ahí: necesitamos voces feministas, no necesitamos voces de cualquier mujer. Yo no quiero la voz de Vidal, quiero la voz de una compañera feminista, que tenga perspectiva y que tenga los ovarios para poder discutir y defender a las compañeras. Y lo necesitamos porque siempre hay un machirulo al frente que va a querer con alguna complicidad de otro machirulo, redoblar las apuestas.
Creo que más allá de que haya una ley, hay voluntad. Necesitamos mujeres y diversidades feministas en las listas y en los lugares de decisión. Como dije antes, el feminismo nos hace mejores personas, tener más empatía, es reparar y devolver igualdad.
Creo que es una pena que tenga que haber un Cupo Trans para que ingresen a laburar. Hoy esto existe y en Quilmes estamos haciéndolo una realidad efectiva. Las compañeras travas están contentas, pero las queremos en lugares de toma de decisión, que puedan contar sus vivencias, sus realidades travas, sus historias. No necesitamos solo mujeres, sino también al colectivo LGBT. Sería reparador.
Necesitamos voces feministas, no necesitamos voces de cualquier mujer. Yo no quiero la voz de Vidal, quiero la voz de una compañera feminista, que tenga perspectiva y que tenga los ovarios para poder discutir y defender a las compañeras.
Tenemos un montón que nos conducen de manera histórica y en las organizaciones, pero también necesitamos que nos conduzcan desde lugares de gestión. El año que viene hay elecciones y no dudo ni un segundo de que esto va a pasar. Es el momento de la revolución y en eso estamos porque solas no podemos, pero solas no vamos a estar nunca más.