Frente a un precipitado regreso a la presencialidad el próximo 17 de febrero, conversamos con Esteban Sueyro de la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE) en la Ciudad de Buenos Aires. Sin protocolos acordes a la realidad de una pandemia y con mucha incertidumbre, advierte que los docentes quieren volver a las aulas, pero que sienten que no son cuidados.
¿Qué postura tiene UTE con respecto al regreso a la presencialidad?
UTE tiene una postura que tiene que ver con una presencialidad responsable. Es necesario entender que hay que pensar un protocolo que cuide a les pibes, a los maestros y a toda la comunidad educativa. Y ese no es el protocolo que está pensando el Gobierno de la Ciudad. Todavía no está claro que va pasar con un montón de situaciones que continúan trabajándose. Un claro ejemplo es la vacunación. Hay una incertidumbre muy grande y no hay ningún plan de vacunación para los docentes en la Ciudad.
¿Cómo lo está manejando el Gobierno de la Ciudad?
La Ciudad te llama a discutir la presencialidad, pero no escucha. Es un diálogo en el que impone y es muy difícil poder acordar. En ese sentido, estamos haciendo el mayor esfuerzo posible y vamos a todas las reuniones. Pero la mayoría de las cuestiones que nosotros estamos planteando están en contra de lo que plantea el protocolo. Buscan una foto de comienzo de clases, más pensada en el marketing que en la necesidad de los estudiantes y de los docentes.
¿Se podrán respetar protocolos y medidas de prevención si les permiten dar clases a diferentes grupos y en distintas escuelas?
Los profesores de media y los curriculares en primaria en general van de escuela en escuela. En ese sentido, es muy complicada la implementación de los protocolos. Justo hay un plenario con los compañeros de Media para ver cómo actuamos en ese sentido, pero la verdad es muy complicado, esperamos que las conducciones de las escuelas busquen el tema de tratar de que los profesores estén asignados a determinados cursos y que no vayan de un lado a otro. Es muy complicado mas que nada en el area de media y técnica.
¿Crees que es suficiente con los testeos que propone la ministra Acuña?
El problema es la vacunación que no propone Acuña ni el ministro Quirós para los docentes y para los estudiantes también. Los testeos lo que hacen es aislar ante una situación de contagio, pero la prevención se da en relación a la vacuna, pero no hay ningún plan.
¿Sentís que se banaliza el trabajo docente en el marco de la pandemia?
Se banaliza el trabajo docente porque no se los cuida. Además, aquellos que que se preocupan o dicen preocuparse por el sistema educativo y por la presencialidad de las clases son los mismos que, sistemáticamente, vienen bajando el presupuesto educativo. Desde que asumió el gobierno de Mauricio Macri en la Ciudad de Buenos aires, el presupuesto viene bajando casi 1 punto por año. Del 28, tenemos casi un 16% dedicado a la educación. Muy preocupados en realidad no están.
¿Cómo esperan que sea el regreso a la presencialidad?
Lo esperamos con mucha incertidumbre. El lunes volvieron los maestros a las escuelas… los profesores también. Hay mucha incertidumbre sobre la posibilidad de nuevos contagios, llegando a otoño. Sabemos que este virus también funciona con la estacionalidad… Creemos que es importante poder ir midiendo e ir viendo paso a paso como se viene dando. Creemos que el horizonte es siempre la vacunación.
¿Esperaban que la propuesta del gobierno porteño sea más empática?
La propuesta del gobierno de la Ciudad es muy poco discutida y más que nada basada en el marketing y la foto. Hay aulas muy pequeñas en la Ciudad, donde va a ser muy difícil contener al grupo. Y habrá que dividir entre dos o tres subgrupos, lo que haría necesario que el gobierno contrate más docentes, cosa que no creo que haga porque el presupuesto educativo es muy acotado.
Me parece que van a buscar la foto, pero no están viendo lo que pasa en muchas escuelas de la Ciudad. Algunas no cuenta con ventilación, no tienen ventanas a la calle y un montón de situaciones que son muy complejas. Además, el protocolo eso se lo tira a la dirección de la escuela y no al Gobierno de la Ciudad.
Con este panorama, ¿Pueden arrancar las clases presenciales el 17 de febrero?
Las clases van a arrancar el 17 de febrero porque los docentes queremos volver a las aulas. Lo que no queremos es hacernos cargo de una situación donde el virus va a circular más. Muchos de los chicos no corren riesgos porque no son a los que más ataca, pero van a contagiar a familiares suyos y en muchos casos sabemos que las personas mayores tienen consecuencias letales. En este sentido, hacemos responsables al gobierno de la Ciudad sobre esta situación. Veremos como se viene dando, creemos que esto es un proceso y no una foto. Iremos evaluando en cada escuela la posibilidad de dar clases o no.