Patricio Reynoso, sospechoso del femicidio de Pilar Riesco -su novia de ese entonces- en marzo de 2020, se entregó este miércoles a la Justicia. Permaneció prófugo más de dos meses.
En la tarde de ayer se presentó junto a su abogado en la sede de la División Homicidios de la Policía de la Ciudad en Palermo. Reynoso era intensamente buscado, incluso ofrecían una recompensa de un millón y medio de pesos para dar con su paradero.
Además de tener captura nacional, Reynoso también había ingresado a la lista de alertas rojas de los más buscados por Interpol.
Finalmente, quedó detenido a disposición de la jueza en lo Criminal y Correccional 51, Graciela Angulo de Quinn. Se lo imputa en la causa por «homicidio calificado por el vínculo y por haber mediado violencia de género». El delito prevé una pena de prisión perpetua.
El pasado 31 de marzo de 2021 el acusado fue declarado en rebeldía. La jueza ordenó su detención, pero al no hallarlo, se libró su captura nacional e internacional el 5 de abril.
“Esta causa es una locura. Lo van a indagar con los mismos hechos por los que ya lo indagaron al momento del hecho y va a reiterar que es inocente y que la chica se tiró sola del balcón”.
El abogado de Patricio Reynoso, Andrés Rabinovich, aseguró que su cliente permanecerá en la misma posición. Según sus declaraciones, él es inocente y la víctima se suicidó tras una discusión.
En diálogo con Telam, el defensor sostuvo que “lo único que varió es que la querella puso un perito criminalístico que adecuó la pelea que tuvieron adentro del departamento y la puso en el balcón. Pero eso no es lo que sucedió. Nunca pudieron invalidar a los testigos que declararon haber visto en forma directa que la chica se arrojó sola”.
Y agregó: “esta causa es una locura. Lo van a indagar con los mismos hechos por los que ya lo indagaron al momento del hecho y va a reiterar que es inocente y que la chica se tiró sola del balcón”.
La audiencia preliminar a la indagatoria estaba prevista para este jueves a las 12.30. De manera virtual por la jueza en lo Criminal y Correccional 51, Graciela Angulo de Quinn, y por el fiscal de la causa, Martín Perrando.