El asesinato de un joven de 24 años conmocionó a España. El fin de semana pasado un grupo de personas golpeó brutalmente a Samuel Luiz, un estudiante de enfermería. Según confirmaron sus amigas presentes en el momento del hecho, mientras lo agredían, le gritaban «maricón de mierda».
A lo largo y ancho del país, el lunes se manifestaron miles de personas para denunciar un «crimen homófobo» y para exigir la detención de los agresores. Por lo que se pudo captar en las cámaras del lugar y videos grabados con celulares, trece personas fueron detenidas por el hecho.
Entre los carteles se exigía «Justicia para Samuel. Homofobia y fascismo son lo mismo«, «No son golpes, son asesinatos», «Stop homofobia» y «Nos están matando».
“A las familias de los que mataron a mi hijo les preguntaría cómo se sentirían ellos si estuvieran en mi lugar”, reflexionó el padre de Samuel, Maxsoud Luiz, en diálogo con La Voz de Galicia.
La marcha más multitudinaria se dio en Puerta del Sol, en Madrid. Entre los miles de manifestantes, las banderas del Orgullo dijeron presente para reivindicar los derechos de todo el colectivo LGBTIQ+.
Al grito de «Justicia por Samuel» o «No son golpes, son asesinatos», amigos y familiares denuncian un crimen del odio.
Fernando Grande-Marlaska, ministro del Interior de España, advirtió que «no está excluida ninguna hipótesis, ni el delito de odio ni cualquier otro».
A las movilizaciones, se sumó una campaña en redes sociales bajo el hashtag #JusticiaParaSamuel.
Versiones cruzadas
Según la versión policial, Samuel estaba con un grupo de amigas en la entrada de un boliche hablando por videollamada. Un hombre creyó que lo estaba filmando a él y a sus amigos y lo increpó.
«Uno de ellos lo increpó y le dio un puñetazo y después se sumaron sus amigos. Al menos siete individuos empezaron a pegar y dar patadas a Samuel Luiz, y él no pudo defenderse«, informó un oficial al diario El País.
Las amigas de la víctima no apoyaron esa versión y señalaron que la agresión surgió por la orientación sexual de Samuel. También agregaron que los agresores le gritaban «maricón» mientras le pegaban.
Después del acto de violencia, los funcionarios de la salud intentaron salvarle la vida, pero murió en el hospital.
La carta de padre de Samuel
En las últimas horas, medios españoles compartieron una carta que escribió el padre de la víctima y que pegó en el lugar donde su hijo recibió una golpiza. Lo acompañaron amigos, familiares y activistas del colectivo LGBTIQ+.
“Hola, soy el padre de Samuel, quiero primeramente agradecer el excelente trabajo de los equipos del 061 (número de urgencias) por todo el esfuerzo realizado en cuanto al pronto atendimiento de nuestro hijo”, expresó en su dedicatoria.
“Nos quitaron la única luz que iluminaba nuestra vida. Sabemos que vamos a tener un camino muy largo por recorrer. Estaremos apoyados en nuestra familia, amigos y compañeros que nos ayudarán a salir de este camino oscuro”, continúa la carta. “Que Dios pueda recompensar todo el cariño que nos estáis brindando. Un abrazo muy fuerte a todos y deseamos que nunca más llegue a ocurrir otro día tan negro como el que estamos viviendo. No a la violencia», concluyó.