En las ultimas horas se confirmó que el cuerpo hallado en la localidad de Ingeniero Budge era el de Nancy Videla. La mujer de 31 años estaba desaparecida desde el viernes 26 de noviembre, última vez que se comunicó con su pareja por WhatsApp.
Nancy Beatriz Videla salió de su trabajo y us el transporte público. Debía tomarse dos colectivos y un tren para llegar a su casa en Villa Albertina, partido de Lomas de Zamora. Sin embargo, pese a que anunció por mensajes que estaba en viaje, nunca llegó.
Su desaparición trajo aparejado una pregunta que se hizo mediática rápidamente: ¿Dónde está Nancy? Las preguntas eran muchas y las versiones, también. El tratamiento mediático volvió a hacer agua, a dejarnos a medias. Entre la bronca y la angustia de una comunicación con tanta falta de empatía como de responsabilidad.
En más de un programa de televisión o portal digital se reconstruyeron los últimos minutos de Nancy según lo que se podía encontrar en la SUBE. Además de mostrar los mensajes, los interpretaron e incluso terminaron cayendo, como tantas veces, en análisis banales. ¿Por qué le dijo que estaba esperando el tren si estaban en el colectivo? ¿Por qué le mintió a su novio? ¿Con quién estaba? Las mil preguntas siempre llegan a lugares indeseados.
A ello se sumó la reproducción del llamado de la persona que pidió realizar la denuncia de manera anónima. Solicitó que resguarden su identidad por seguridad, pero poco se entendió. La primicia empujó una vez más a la irresponsabilidad. La voz de la testigo es clara, no está retocada. Está expuesta.
El femicidio de Nancy Videla no es una excepción, es la norma. El tratamiento mediático tampoco es la excepción, es parte de la insana costumbre patriarcal de apuntar a la víctima y responsabilizarla de su propio asesinato.
¿Qué pasó con Nancy?
Nancy pasó la noche del jueves 25 en un departamento ubicado sobre Avenida Santa Fe, en el barrio porteño de Palermo. Allí trabaja desde hace un año como niñera para una familia. Según las cámaras de seguridad del edificio, salió a las 15.30 del viernes aunque luego el encargado del lugar señaló un desfasaje de aproximadamente una hora y media en el horario de las cámaras. Es decir, aproximadamente salió a las 17.
De acuerdo a la reconstrucción del caso, Nancy se subió al colectivo 39 hasta Constitución y conversó con su novio hasta las 18.38. Allí le avisa estar esperando el tren Roca.
Su última conexión en WhatsApp fue aquella tarde a las 18:38. Desde entonces no se supo más nada hasta esta madrugada cuando el ministro de Seguridad anunció la aparición de un cuerpo femenino con características similares a l de la victima. Estaba desnuda, envuelta en una bolsa y con cal encima. Totalmente deshumanizada, como si fuera un cacho de carne, basura podrida.
Su cuerpo estaba en un contrapiso de una vivienda que estaba a 100 metros de la casa de su pareja en Ingeniero Budge. La autopsia determinó que su muerte fue producto de una fractura y traumatismo de cráneo a raíz de un golpe. Según informaron fuentes judiciales a Telam, la víctima padeció maniobras de asfixia, sin embargo no fue la causa de su muerte.
Asimismo, según las primeras estimaciones a confirmar de la autopsia, el cuerpo de la joven tenía un estado de descomposición que advertía un largo tiempo en el lugar. Se calculó entre cuatro y cinco días.
No se detectaron signos de abuso, pero se esperan los resultados de hisopados y estudios complementarios.
Damián Lezcano Mendoza
Esta tarde se indagará al único acusado: Damián Lezcano Mendoza. El hombre de 70 años era administrador de la vivienda donde fue hallado el cuerpo y en la que Videla había vivido un tiempo atrás.
El delito que se le imputará es el de «homicidio simple». Asimismo, según se informó, será indagado vía electrónica, con Lezcano desde su lugar de detención.
El detenido cumplió una condena por homicidio por un hecho ocurrido en La Matanza en 2002. La pena venció tres años después, en noviembre de 2005.
Para recibir atención, contención y asesoramiento en situaciones de violencia de género: Línea 144