Cuando creíamos que la situación podía normalizarse, nuevamente los centros de Salud se ven colapsados. Además del calor y el estrés, el personal sanitario sufrió en más de una oportunidad distintos tipos de violencia que quedaron registrados en dispositivos móviles y se viralizaron en redes sociales.
Por abril del 2020, a las 21hs vecinos y vecinas de distintos puntos del país se manifestaban a favor de los y las médicas. Desde los balcones, las puertas de las casas y ventanas, los aplausos se escuchaban por varios minutos. En medio de una situación extraordinaria, los aplausos se disfrazaban de combustible para aquellos que no podían evitar enfrentarse a la pandemia día a día.
De un tiempo a esta parte, las cosas cambiaron abruptamente. Los que antes recibían aplausos, hoy son agredidos. En las últimas semanas, la violencia creció. ¿Qué nos está pasando?
En la Ciudad de la furia
Uno de los primeros casos que se viralizó rápidamente fue la agresión que sufrió el médico a cargo de la Unidad Febril de Urgencia (UFU) del Hospital Donación Francisco Santojanni. Un paciente que esperaba su testeo, golpeó al profesional de la salud porque estaba cansado de esperar.
Esta violencia, obligó a la Asociación de Médicos Municipales (AMM) de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires a tomar medidas de fuerza. En el lugar, se determinó la suspensión de la atención en las 20 UFU hasta garantizar la seguridad de todo el personal. Decisión que no fue permitida por el gobierno de la Ciudad que se aseguró la continuidad de la atención.
Jorge Gilardi, presidente de AMM, explicó a La Nación lo sucedido. “En la jornada de ayer [viernes] nosotros habíamos solicitado que no se habilitaran los testeos porque había poca capacidad y podía derivar en este tipo de cuestiones que terminaron sucediendo. Un hombre enojado, que no se pudo testear, pidió la presencia del responsable de la UFU del Santojanni y cuando vino el doctor Swarman le pegó una trompada que lo dejó sentado en el piso y con la nariz rota”.
Pablo Manjarin, médico en el Santojanni, explica en un hilo las situaciones incómodas y de violencia que vivió «hisopando pacientes en la UFU del Santojanni».
Hospital Martínez de Pacheco: una médica golpeada el 31 de diciembre
Las imágenes quedaron registradas por otra paciente que se encontraba en la guardia. Durante la noche del 31, una mujer comenzó a gritar porque quería que atendieran a su hermana con urgencia. La mujer cuestionaba a la médica cirujana de turno porque la consideraba poco profesional. “¿Por qué no te ponés un poco en su lugar y te fijás lo que tiene?”, insistía.
Mientras la mujer gritaba, se defendía diciendo que no estaba faltándole el respeto a nadie. Sin embargo, cuando la violencia agotó a la médica, esta explicó que era ella la que tomaba las decisiones. Estas palabras violentaron aún más a la mujer, que comenzó a los golpes contra la médica cirujana y su compañera, que permanecía a su lado.
La situación no terminó ahí. En la sede policial continuaron las agresiones. El director del Hospital General de Pacheco señaló en diálogo con Télam: «El tema no terminó con lo que se observó en el video que se hizo público, sino también en la Comisaría 1 de Pacheco, donde se reiteraron las agresiones, lo que nos obligó a ratificar la denuncia y además, por razones operativas, se procedió al traslado de la hermana de la agresora a otro hospital”. Y pidió: «instamos a la gente a que se vacune, a que sea tolerante. Hay mucha angustia, en este hospital fallecieron tres enfermeras en este tiempo, la gente no se tomó vacaciones o lo hizo muy pocos días, y siempre se actúa persuadiendo, buscando calmar”.
«Si no estás capacitada para estar 24 horas parada, no vengas»
En un centro de salud de Mendoza, una médica le pide paciencia a los pacientes porque el personal está haciendo todo lo que puede.
«No tengo tiempo ni para ir al baño. Me duelen las rodillas, ya no puedo más de atender a la gente», explicó. En el video, se escucha a un hombre responder: «si no estás capacitada, busquen a otra persona. No nos falten el respeto». Ante estas palabras, ella respondió: «nadie está capacitado». Sin embargo, él repitió una vez más «si no estás capacitada para estar parada 24 horas, no vengas».
Al reclamo se sumó otro hombre, asegurando «pago todos mis impuestos. Vos cobras de mi plata», una vez más utilizando un fundamento patético para agredir a la médica.