Este jueves la Justicia de Rusia condenó a cinco años de prisión a un joven de 16 años acusado de «entrenamiento para cometer actos terroristas» al planear la voladura de un edificio virtual de los servicios secretos rusos en el videojuego Minecraft.
La reacción de las autoridades rusas no sorprenden. Es muy común que respondan con severidad ante casos sospechosos de terrorismo o vandalismo. Incluso en los juegos y a menores de edad.
Además de sentenciar a Nikita Uvarov, el tribunal condenó a otros dos adolescentes. Según informó la agencia de noticias AFP, a estos se les suspendió las penas de prisión por haber cooperado con los investigadores.
En el verano de 2020, los tres adolescentes quedaron arrestados en Kamsk por distribuir folletos de apoyo a un matemático y activista anarquista de Moscú que era juzgado por vandalismo. Asimismo, afirman que se entrenaban para fabricar bombas artesanales reales.
Además, según informaron los investigadores, los jóvenes tenían conversaciones en las que armaban planes para hacer explotar un edificio virtual de los Servicios de Seguridad de Rusia (FSB) creado en Minecraft. El videojuego permite construir edificios abandonados. En muchos casos, usuarios recrean ciudades enteras del mundo real.
En la última audiencia del proceso, Uvarov, quien reiteró que no era «un terrorista», denunció «presiones» de las autoridades. También negó las acusaciones.
Fuente: Telam