Luego de una denuncia que realizó la Comuna acerca del funcionamiento ilegal de establecimientos denominados metaleras -compra y venta de cable, metales, etc-, en la jornada del jueves se llevaron adelante 20 allanamientos para verificar la procedencia de los productos.
La carátula de la causa fue denominada “encubrimiento agravado por el ánimo de lucro, infracción LEY 25.761 (RUDAC), clausuras infracción Ley 13.564 (artículo 4)”. Como resultado de los procedimientos, se detuvieron a cuatro personas e incautaron gran cantidad de objetos y se clausuraron los comercios allanados.
“Tras una ardua investigación, se llevaron adelante 20 allanamientos simultáneos en distintas zonas de Quilmes», expresó el titular de la Secretaría de Seguridad y Ordenamiento Urbano de Quilmes, Gaspar De Stéfano. Y detalló que «se logró desbaratar bandas que comercializaban cables y metales robados».
Además de lo mencionado por el funcionario, también se incautaron tapas de alcantarillado y rejillas. Estos elementos pertenecían al Municipio de Quilmes y a empresas prestatarias de servicios, además de registrar autopartes.
La tarea investigativa comenzó luego de una denuncia de la Secretaría de Seguridad y Ordenamiento Urbano de Quilmes. Contó con la participación de la UFIJ Nº 6 del Departamento Judicial de Quilmes, a cargo de Mariana Curra Samaniego; y personal de la Estación de Policía de Quilmes con sus distintas comisarías.
El objetivo fue secuestrar elementos robados de la vía pública y terminaron en las metaleras para la cadena de comercialización.
Elementos secuestrados
Entre los elementos secuestrados se hallaron rollos de cable forrado (aéreos y subterráneos) de empresas de telecomunicaciones; bolsones de arpillera conteniendo en su interior cables multipares; rollos de cable de cobre forrados con goma; cinco teléfonos celulares; cobre; una placa de fibra óptica wifi flex DIO; un eje trasero de automotor; una cremallera; un cárter; una caja de cambios; dos semiejes; un block de motor; un múltiple de escape; dos caños de escape automotor; un tanque de nafta de motovehículo; seis puertas de automóviles; cinco tubos de GNC; dos guardabarros; diez paragolpes; dos carrocerías, y un block de motor con poseía pedido de secuestro activo a requerimiento de la UFI Nº 1 por hurto agravado.
También fueron parte del operativo la Agencia de Fiscalización y Control Comunal, a cargo de Alejandra Cordeiro, que procedió a la clausura de los establecimientos allanados; y la Secretaría de Servicio Públicos, encabezada por Ángel García, que constató que varios de los elementos secuestrados, como tapas y rejillas, habían sido robadas de la vía pública y pertenecían al Municipio de Quilmes.