La cuarta edición de la Semana de la no dulzura comenzó este lunes bajo el lema: «Menos super y kioskos, más dietéticas y verdulerías».
La campaña busca generar conciencia sobre la importancia de moderar el consumo de azúcar para prevenir enfermedades crónicas no transmisibles.
Este año la edición se compone de siete piezas gráficas con fotos de animales que tienen la capacidad de camuflarse con el entorno. Las imágenes están acompañadas de un mensaje: «aunque no lo veamos, el azúcar está en más de la mitad de los productos de supermercado».
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La campaña de este año propone acompañar el proceso de implementación de la Ley de Etiquetado Frontal de Alimentos. Ley promulgada en noviembre de 2021 y reglamentada en marzo de este año.
Recordemos que la norma le brindará a los consumidores información clara, oportuna y veraz sobre el valor nutricional de los alimentos mediante un sello octogonal en la cara principal o frente de los envases.
Esto evidenciará el contenido de azúcar que actualmente se enconde entre más de 50 nombres diferentes como jarabe de maíz, fructosa, sacarosa o sirope de agave.
Cabe destacar que en Argentina estamos consumiendo al rededor de 115 gramos de azúcar por día, el tripe de lo que recomienza la OMS que va desde 25 a 50 gramos por habitante.
El exceso de azúcar se explica muy simple. Es un ingrediente barato para las industrias y aporta más sabor a los productos.
Las consecuencias son graves. Favorece la obesidad y otras enfermedades crónicas no transmisibles como diabetes, cáncer, enfermedades cardiovasculares y enfermedades cerebrovasculares, que en su conjunto constituyen la primera causa de muerte en el país.
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