El Día Mundial del Preservativo fue creado en 2008 por AHF para generar conciencia en el autocuidado y difundir el correcto uso del condón para evitar la transmisión de infecciones de transmisión sexual como la sífilis, gonorrea, VIH y HPV.
En la previa del Día de San Valentin, se propone utilizar el único método anticonceptivo que va más allá de un posible embarazo y responde ante posibles contagios de ETS. Sin embargo, hay grandes mitos que buscan profundizar la desinformación, confundiendo y alentando su no uso.
De la mano de Fundación Huésped, repasamos cuándo, cómo y de qué manera usarlo.
El preservativo se usa desde el comienzo de la relación sexual hasta el final. Esto incluye el juego previo, el sexo oral, el sexo vaginal y anal.
Para usarlo correctamente, primero hay que chequear que no tenga aire y no esté vencido. Se recomienda evitar abrir el paquete con los dientes.
Para ponerlo, se debe colocar sobre el pene, apretar la punta para sacar el aire y desenrollarlo hasta la base. Es importante que cuando lo hagas el pene esté erecto, para que se mantenga en su lugar durante toda la relación sexual.
¿Qué pasa si no se desenrolla cuando lo estás colocando? Posiblemente lo hayas puesto al revés. Ya no podes usarlo, tiralo y abrí uno nuevo.
Cuando termine la relación sexual, no esperes a sacar el preservativo. Una vez que el varón haya eyaculado, se debe sacar antes de que se pierda la erección para evitar que se derrame el semen. Cuando lo sacas, se debe realizar un nudo para que no se salga el líquido y tirarlo a la basura.
Qué pasa si no tengo pene
En este caso, se puede hacer un campo de látex a partir de un preservativo. Todavía los preservativos para vulva no abundan y los cuidados se tornan más difíciles.
para hacer un campo de latex, se debe desenvolver el preservativo y cortar el aro de la base. A continuación, cortar en forma vertical, a lo largo. De esta manera vas a conseguir un cuadrado de látex para poner sobre la vagina o el ano. De esta manera la práctica se vuelve segura.
Claves para un uso adecuado
- Cambiar de preservativo después de cada relación sexual. También después de eyacular o con cada erección nueva.
- Elegir el talle adecuado. Si no llega a la base o se siente muy apretado, no es tu talle.
- Usar solo lubricantes a base de silicona o agua. Nunca a base de aceite porque pueden dañar el látex.
- Jamás usar dos preservativos porque el riesgo de roturas es más alto.
- Abrilo con cuidado: no uses los dientes, ni una tijera.
- El uso de preservativo es responsabilidad de las personas que participan en la relación sexual.
- La alergia al latex no es excusa para no usar preservativo. Existen algunos fabricados con poliuretano o poliisopreno que son aptos para personas con esta alergia.
- No guardarlos mucho tiempo en la cartera, la billetera o un bolsillo. El calor o la humedad excesivos pueden afectar el material con el que están hechos.
¿Qué hacer si el preservativo se rompe?
Dentro de las 12 horas de la situación de riesgo, consultar en el centro de salud más cercano. Un profesional evaluará si es necesaria la profilaxis post-exposición para prevenir el VIH y la anticoncepción hormonal de emergencia.
Podés llamar a la línea de salud sexual gratuita que ofrece el Programa Nacional de Salud Sexual y Reproductiva 0800-222-3444.
¿Dónde puedo retirar preservativos?
En los espacios fijos de distribución se pueden encontrar los preservativos gratuitos que el Ministerio de Salud de la Nación pone a disposición de la población.
Están ubicados en espacios de salud (centros de salud, hospitales), culturales, educativas, organizaciones sociales, gremiales, sedes gubernamentales, entre otros.
En los puestos fijos se utiliza un dispenser de preservativos que puede ser colocado sobre un escritorio o mostrador, o bien fijarse a la pared.
La dirección, teléfono de cada puesto puede ser consultado llamando al 0800 3333 444 o consultando con el referente provincial en Listado de referentes provinciales.
La distribución de preservativos es gratuita y la cantidad la define cada persona.
Con información de Fundación Huésped