Los operativos se concretaron el 22 y el 23 de mayo en los supermercados mayoristas Yaguar, Maxiconsumo, Vital, Makro y Diarco. Entre otras cosas, controlaron el precio y el stock de los aceites que están dentro del fideicomiso aceitero.
«A partir de estos operativos se detectaron incumplimientos que constituyen presunto fraude en los precios de venta por parte de los mayoristas. Comercializan el aceite del fideicomiso, que compran a un precio subsidiado 45% inferior al de mercado, a los comercios minoristas a un precio mucho mayor a los valores acordados en Precios Justos«, indicó Comercio en un comunicado.
De probarse esta acción, «representaría una estafa por parte de los mayoristas hacia el Estado y hacia los consumidores», agregó.
Comercio señaló que en las inspecciones se detectaron sobreprecios en aceites de girasol y mezcla. En las presentaciones de 1,5 litro y 900 ml que van desde un 41% a un 101%.
En ese marco, el secretario de Comercio, Matías Tombolini, enviará un requerimiento de subsanación de desvío detectado. Además, exigirá que los mayoristas arbitren los medios necesarios para resarcir a los consumidores afectados por las sumas indebidamente cobradas.
Además, las empresas mayoristas deberán informar a la Secretaría, en el plazo de cinco días, las medidas implementadas para dar cumplimiento a lo requerido precedentemente.
Por otro lado, Tombolini se reunió con los abastecedores para ponerlos al tanto de la situación. Asimismo, según se informó en el texto, iniciará una auditoría que «demuestre que estas empresas entregaron a precio subsidiado la mercadería que luego se comercializaba a precio vil».
El fideicomiso aceitero privado es una herramienta que está vigente desde febrero de 2021. El objetivo es mantener una oferta en góndola a precios desacoplados de los vaivenes de las cotizaciones de los commodities en el plano internacional.