El 2 de agosto el PAMI sufrió un hackeo en su base de datos. Miles de beneficiarios y proveedores sufrieron una vulneración sobre su información privada. La situación se agravó cuando la organización criminal publicó toda la información en internet y obligó al organismo público a publicar recomendaciones para resguardar la seguridad de los y las jubiladas.
Bajo el nombre Rhysida, los ladrones utilizaron un virus informático llamado ransomware que impidió el acceso del PAMI a un conjunto de archivos de 831 gigabytes que ahora se filtraron en la darkweb y son de libre acceso.
El peligro para los jubilados es que cualquiera puede tener en sus manos historias clínicas, estudios y todo tipo de datos personales. Además, disponen de distintos datos de contratación de proveedores.
Por el ataque, el PAMI tuvo que limitar el acceso a sus sistemas. Además, las páginas para realizar trámites estuvieron caídas durante dos días por el accionar de los ciberdelincuentes que robaron esta sensible base de datos.
Según se pudo saber, la exigencia para entregar la clave de acceso al material encriptado o para no filtrarla era de 25 bitcoins, el equivalente a u$d 650.000. El organismo decidió no abonarlo, motivo por el cual liberaron la información.
En el material que se filtró se encuentran historias clínicas, fichas de tratamientos, vacunaciones a domicilio, formularios para tratamientos oncológicos, informes de laboratorio, y estudios que remiten a tomografías, ecografías de carácter sensible.
Asimismo, robaron archivos de auditorías, facturación de centros médicos con detalles de pacientes, partidas presupuestarias, CVs y contratos de proveedores.
Qué cuidados deben tener los y las usuarias de PAMI
«Queremos informarles que los sistemas de PAMI han experimentado un ciberataque que ha afectado temporalmente el servicio. El ataque ha sido mitigado y toda la información de nuestros servidores se encuentra resguardada y protegida«, fue el mensaje del organismo el día del ataque. Sin embargo, la información robada fue filtrada por los ciberdelincuentes.
La recomendación para los jubilados a la hora de realizar trámites en PAMI luego de esta filtración en la que pueden haberse difundido sus datos son:
- Manejarse solo por canales oficiales: #138, 0800-222-7264 o a través del WhatsApp oficial 11 4370-3138.
- No brindar información personal ni claves de manera telefónica
- Prestar atención al remitente de los correos electrónicos (@pami.org.ar)
- No dar información sensible pam