En la mañana del 27 de junio, hace poco más de un mes, los trabajadores de la sucursal más grande de Medamax, un mayorista de artículos de limpieza y perfumería reconocido en todo el país, llegaron a la puerta de su trabajo a las 06.30 como todos los días. No los sorprendió ver el portón de ingreso cerrado con candado. Lo que los sorprendió es que el personal de seguridad les informara que todos estaban despedidos.
Son 70 trabajadores, con una antigüedad promedio de 20 años, que desde entonces mantienen un acampe las 24 horas. Se dividen en varios turnos para impedir que se termine de vaciar o desmantelar la sucursal que hasta hace un mes significó el sustento de las familias.
En un contexto de recesión profunda en el que muchas empresas y comercios cierran por la caída de las ventas, Medamax podría ser un caso pionero de otro tipo de práctica empresarial. ¿Cuál? La de despedir a los asalariados contratados que tienen sus derechos garantizados por la reglamentación previa, en función de aprovechar las ventajas que ofrece el nuevo marco normativo.
Qué es Medamax
Medamax es una empresa perteneciente a la familia De Lucía, con casi treinta años de trayectoria y ocho sucursales en total, dos en capitales provinciales: Salta y Tucumán, y las restantes en el conurbano bonaerense: José C. Paz, Claypole, Berazategui, San Miguel, Quilmes y la mencionada, ubicada en Gregorio de Laferrere, La Matanza.
Según denuncian los trabajadores despedidos, el objetivo de la jugada es la precarización laboral. Dicen que se trata de una “quiebra simulada” y un pseudo vaciamiento para poder despedir a los trabajadores “caros”, tanto los que cobran un diferencial por la antigüedad en el puesto como aquellos que tienen beneficios por convenios laborales.
El objetivo de la empresa sería reabrir en un par de meses y contratar trabajadores bajo el nuevo régimen que permite la Ley Bases, con períodos de prueba más largos y sin multas al empleo ilegal, lo que a los explotadores les cerraría por todos lados.
“La empresa lo único que hizo con nosotros es deshacerse, de manera premeditada. Pretenden sacarse de encima a trabajadores con derechos, para luego volver a abrir sus puertas y tomar trabajadores con las nuevas leyes, precarizados, para ahorrarse lo que para ellos es un costo más: el salario del trabajador”, explica Patricio González en diálogo con El Numeral.
“Somos 70 trabajadores, 70 familias que quedamos en la calle. Hace dos meses estamos sin cobrar. No nos pagaron el último mes trabajado, no nos pagaron el aguinaldo y juegan con nuestra necesidad para utilizarlo como un medio extorsivo para que sedamos ante lo que ellos quieren hacer: indemnizarnos con el 50% del total que nos corresponde”, explica.
“El compañero que más antigüedad tiene, tiene 25 años. Después hay dos compañeros con 24 y seguimos el grueso que tenemos entre 21 y 20 años en la empresa”, agrega.
Según relatan los trabajadores, los empresarios se amparan en el art. 247 de la Ley de Contrato de Trabajo, que justifica el despido por “falta o disminución de trabajo”, “fuerza mayor” o cierre forzado de la empresa para pagar el 50 por ciento de la indemnización por ley. Sin embargo, mientras demuestran una crisis en la sucursal mencionada, en el resto funcionan con absoluta normalidad.
Eso no es todo. No se manejaron con el Ministerio de Trabajo, no presentaron amparo de crisis y no presentaron balances. En simultáneo, comenzaron a generar una crisis.
“Nosotros conocemos los movimientos después de tanto tiempo trabajando acá como nadie y veíamos el vaciamiento, pero la empresa lo negaba en todo momento. Esto no es una crisis generada por falta de ventas, esto es una crisis generada y planificada por la empresa para intentar llegar a este momento y justificar lo que ya tenían programado y planeado: dejarnos sin trabajo”, agrega González, quién además relata a pesar de que la falta de compra a los proveedores, los compradores con la poca oferta con la que contaban seguían comprando para sostener las ventas y que los trabajadores puedan continuar en sus puestos.
“La empresa forzó la crisis y nosotros seguíamos funcionando. La capacidad de ventas gracias a los compañeros todavía era significativa para poder seguir aguantando”, resalta el delegado.
Los trabajadores resaltan la falta de diálogo y la intención de generar desgaste y cansancio por parte de la empresa. Sin embargo, el apoyo de los sectores gremiales y sociales se volvió fundamental para darles fuerzas a continuar resistiendo.
“Es inmenso el apoyo que estamos recibiendo de un montón de sectores, principalmente del Sindicato de Empleados y Obreros de Comercio (SEOCA) que nos representa desde el día uno. Incluso tuvimos una entrevista personal con el secretario gremial y nos dejó en claro que iban a estar hasta el último momento dándonos una mano para lo que necesitemos. Después otros sindicatos que de manera solidaria se acercan día a día, para darnos su palabra de aliento, para traernos algún suministro, para que podamos seguir adelante. El apoyo que estamos teniendo es lo que no esta manteniendo firmes”, agrega Patricio.
CERRÓ MEDAMAX DE GREGORIO DE LAFERRERE Y DEJO A 70 FAMILIAS EN LA CALLE
Los trabajadores llegaron esta mañana a la sucursal y no les permitieron el ingreso. Los trabajadores resisten en la puerta del local pic.twitter.com/lidIbQ3Cwp
— SEOCAprensa (@PrensaSeoca) June 27, 2024
Antesala
A pesar de que los trabajadores tuvieron que improvisar las medidas de fuerza, como el acampe y una serie de movilizaciones por la zona, hubo otros conflictos con la empresa. Por un lado, los convenios que Medamax no quería respetar o por intentos de despidos masivos en épocas de gobiernos neoliberales.
“En 2019 tenían planeado despedir a más de 20 trabajadores, echaron a una primera tanda de 10 y no fue de manera casual, fue en pleno macrismo, una gestión que también tenía este tipo de orientación empresarial, corporativa y en contra de los derechos de los trabajadores”, explica el delegado y agrega que “no hace falta leer tanta historia para entender que cuando asumen este tipo de gobiernos con este tipo de orientación política-económica los primeros en ser atacados son los trabajadores”.
“Este escenario se escapaba de la imaginación de cualquiera, este avance contra los derechos de los trabajadores, querer avanzar contra la Ley de Trabajo, ahora querer subir la edad jubilatoria a 75 años. Estamos frente a un gobierno inhumano, insensible. Hasta le quitó los remedios a los pacientes oncológicos, a los jubilados, la comida a los comedores, gente vulnerable donde el estado debería estar presente. Es inhumano lo que estamos viviendo”, concluye.
El impacto de Javier Milei en números: 10 mil empresas menos
El vaciamiento de Medamax por parte de sus propietarios, la familia De Lucía, es verosímil por la profundidad del contexto recesivo. Según un informe presentado por Empresarios Nacionales (ENAC), en el semestre pasado se perdieron diez mil empresas en todo el país.
Los datos surgen de la comparación de empresas que pagan cargas sociales. Eran 537.600 en diciembre y hoy son diez mil menos, con un promedio de 12 trabajadores por empresa.
Día de la independencia: Milei destruyó 10.000 pymes en 6 meses
La Asociación de Empresarios y Empresarias Nacionales – ENAC – denuncia públicamente que en 6 meses Javier Milei y Luis Caputo destruyeron 10.000 empresas pymes en la Argentina
👇… pic.twitter.com/GwsYWavUFv— Asociación de Empresarios y Empresarias Nacionales (@EnacArgentina) July 9, 2024