Es Tuyo, del Barrio, de Todes

Pasan las semanas y Pettovello sigue sin repartir los alimentos próximos a vencer

Sandra Pettovello volvió a incumplir la orden judicial y presentó un escrito donde dice que no entregaron los alimentos por decisión del gobierno anterior. Ahora, cada provincia deberá solicitar la mercadería y hacerse cargo del reparto.

La ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, incumplió nuevamente la orden judicial que insistía con entregar un plan de reparto inmediato de los alimentos que tiene almacenados, y que al día de hoy suman 5,8 millones de kilos, cuya fecha de vencimiento se acerca día a día. Ahora, le pasó la responsabilidad a las provincias, quienes deberán pedir la mercadería y hacerse cargo de la logística. Por último, en un giro argumental divorciado de la lógica, afirman que la decisión de no repartir la comida fue del gobierno de Alberto Fernández.

En profundidad

Hay algo clave en el escrito que presentó Pettovello ayer ante la Justicia: entregó el stock de alimentos al 19 de junio y allí consta que aún tienen sin entregar 5.825.946 kilos de comida. Es decir, desde que salió a la luz el almacenamiento de los alimentos, hace un mes, el Gobierno solo repartió la leche en polvo que vence en julio. Nada más.

En la planilla donde figura el stock actual de alimentos guardados en los galpones figuran las fechas próximas de vencimiento. Hay más de un millón de paquetes de lentejas de 400 gramos que tienen primera fecha de vencimiento a mediados de agosto, 459.054 kilos de leche en polvo que tienen primera fecha de vencimiento el 18 de septiembre y 259.334 paquetes de puré de tomate con primera fecha de vencimiento el 30 de septiembre. Estos vencimientos próximos ponen en riesgo su uso, ya que no está garantizado que se lleguen a distribuir y cocinar antes de esas fechas.

Sobre el reparto de la leche en polvo que casi se vence, desde el ministerio dicen que “se verificó por medio de las áreas competentes de la Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia (a requerimiento y solicitud de la Ministra de Capital Humano) la existencia de 465 toneladas de leche en polvo que por la proximidad de su fecha de vencimiento se consideró oportuna y conveniente su inmediata distribución, para lo cual la ministra suscribió con la Fundación CONIN un convenio a tal fin y se coordinó su inmediata distribución a través del Ministerio de Defensa”. Lo cierto es que fue el impulso de Juan Grabois como querellante en la causa por el no reparto de alimentos desde diciembre y la publicación por parte de El Destape de que esa leche estaba por vencer lo que derivó en el reparto del producto.

La negligencia no termina. El documento que presentó el gobierno tiene otra irregularidad. Señalan que también repartieron harina de maíz que estaba próxima a vencer, cuyo destino era San Isidro y Hurlingham pero terminó en el municipio de Capitán Sarmiento, donde manda Javier Iguacel, ex director de Vialidad de Mauricio Macri desde donde ser armaban las causas contra ex funcionarios kirchneristas. No explican por qué ese destino.

Por último, en un giro argumental insólito, ahora Milei y Pettovello dicen que esos alimentos “no han sido repartidos por decisión del anterior gobierno”. Lo afirman después de insistir en que tenían “el fin específico de afrontar y asistir en situaciones de emergencia y catástrofe”, algo que no ocurrió ni luego de la tragedia que dejó 13 muertos en Bahía Blanca, ni en las indundaciones que azotaron la provincia de Corrientes, donde por ejemplo el intendente de Paso de los Libres le pidió a Pettovello alimentos y la ministra ni siquiera le contestó.

Lo único cierto es que todos estos alimentos los compró el gobierno anterior: hace 6 meses que el Estado no compra nada.

Casanello le había dado un nuevo plazo de 72 horas al ministerio de Capital Humano para que cumpliera con la entrega de un plan de reparto inmediato de la comida, pero la cartera volvió a incumplir esta orden judicial y lo que hizo ayer fue informar que convocó a todos los ministerio de Desarrollo Social del país a participar de la distribución de alimentos. De esta manera el Gobierno nacional no se hará cargo del reparto y lo deberán solventar las provincias.

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