¿Quién es la mujer que ofrecía una pistola en Revolución Federal?

“Yo no estoy en el grupo, pero contá conmigo para la actividad bala, tengo unas ganas de usar mi 9 mm”, le habría dicho una mujer de 66 años al líder de Revolución Federal días previos al intento de magnicidio.

La Justicia Federal investiga a una mujer que ofrecía una pistola 9 milímetros en un grupo de Revolución Federal, luego de que el arma fuera encontrada durante el allanamiento del miércoles en su casa.

La nueva línea de investigación se produjo en el marco de la causa en la que el líder de Revolución Federal, Jonathan Morel, y tres participantes de esa agrupación están procesados por el delito de incitación a la violencia.

Los investigadores llegaron al secuestro de la pistola luego de detectar que una persona agendada por Jonathan Morel como “Dali Revolución” la ofrecía para vez que se hablaba de realizar acciones violentas que tuvieran de blanco a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner u otro dirigente de la misma fuerza política.

La causa quedó en manos del juez Marcelo Martínez de Giorgi y entre los querellantes se encuentra la exmandataria y el precandidato presidencial Juan Grabois, ambos víctimas de las acciones desplegadas por Revolución Federal.

Entre las medidas que se tomarán para investigar a la mujer de más de 60 años, se dispondrá la realización de un peritaje del teléfono de la imputada y posibles futuros allanamientos. Cabe destacar que la pistola fue secuestrada junto con una caja que guardaba casi 50 balas.

Según pudo reconstruir la agencia de noticias Télam, “Dali” estaba registrada como legítima usuaria del arma y figura entre los papeles quién fue su instructor de tiro.

Quién es “Dali Revolución”

Los cuatro mensajes escalofriantes de la mujer habían sido detectados hace tiempo, pero recién en mayo se precisó la cercanía respecto del intento de magnicidio.

El fiscal Gerardo Pollicita pidió allanamientos, el juez de la causa le mandó el material a la jueza María Eugenia Capuchetti, que investiga el atentado, pero ella se lo devolvió. Mientras tanto nadie investigaba quién era la persona en cuestión.

Sin embargo, quien dio en la tecla fue el dirigente y querellante Juan Grabois, quién con su equipo de abogados hicieron un rastreo para ver si el número estaba asociado, por ejemplo, a alguna aplicación como Mercado Pago, que permitiera dilucidar de quién se trataba.

Finalmente, la mujer es la misma que ellos señalaron. Se llama Lidia Margarita Casciano, tiene 66 años y habría participado al menos en dos acciones violentas contra el Gobierno Nacional. 

Los mensajes de Lidia

En reuniones virtuales y protestas de Revolución Federal se hablaba con una furia desbordante de matar a la dirigenta del kirchnerismo y a otros dirigentes afines. Eran odiadores agitando el crimen. Solo faltaba quien lo ejecutara.

El hallazgo de los mensajes de “Dali” podrían relacionar a la organización liderada por Morel con el intento de magnicidio. Después que los textos salieron a la luz, la querella de Fernández de Kirchner le pidió a Martínez de Giorgi expresamente que investigue si en Revolución Federal se gestaba un plan para matarla, ya que fue sumamente llamativa la presencia de integrantes del grupo violento en las inmediaciones de la casa de la funcionaria cuando comenzaron las movilizaciones para apoyarla en un momento crítico del juicio que luego buscaría proscribirla.

Queda en duda, la presencia de otros miembros. Entre ellos Leonardo Sosa y Gastón Guerra, quienes estuvieron en el departamento de la vecina de Cristina, Ximena Tezanos Pinto, dos días antes del intento de magnicidio.

“No es una mala idea tengo una 9 mm cualquier cosa me avisan”

LIDIA MARGARITA CASCIANO (66)

El 22 de julio en uno de los grupos de WhatsApp donde estaba “Dali” alguien compartió una publicación que mostraba la manifestación del día anterior frente al Instituto Patria con protagonismo de activistas de Revolución Federal que amenazaban de muerte a CFK.

Al respecto, “Dali” respondió: “Lo único que falta es que la convirtamos en mártir a esta hija de remil putas. Lo que fue agresivo fue el mensaje de amenaza de muerte (…) que no es una mala idea tengo una 9 mm cualquier cosa me avisan”.

Tres días después, el 25 de julio, mientras se debatía en el grupo sobre si ir a la rural a defender al campo, y qué llevaría cada uno, la mujer respondió: “Tengo una 9mm y el mástil de la bandera (el consolador de la Cerruti) y tengo gas pimienta”.

El 25 de agosto, el mismo día que Morel habló sobre la estrategia de meterse entre la multitud para matar a la vicepresidenta también compartió un video de C5N donde se ve a CFK entre la gente, con el título “Histórico. La llegada de Cristina Kirchner rodeada de militancia”, él mismo escribió: “Hay que matarla”. Rápidamente Dali se sumó al llamado de Morel y agregó: “Una granada ahí (…) mi límite es la 9 mm que tengo”

Días antes, el 22, mientras Luciani habría terminado su alegato con el pedido de 12 años de cárcel e inhabilitación para la vicepresidenta, Morel pedía en sus grupos abandonar “el enfoque pacifista”. Es más, el 23 redoblaron la apuesta, y desde Revolución Federal hicieron una movilización contra los simpatizantes de CFK y llevaron bombas molotov bajo la consigna “Que tengan miedo de ser K”.

“Yo no estoy en el grupo pero contá conmigo para la actividad bala, tengo unas ganas de usar mi 9 mm”

Por último, el 27 de agosto, Lidia tuvo un diálogo privado con Morel y le pidió la letra de una canción. Una parte decía: “El pueblo unido jamás va a ser vencido. A los pibes de La Cámpora les digo. Con Cristina yo me meto y la persigo. Cristina presa, el pueblo Unido. Cristina presa, el Pueblo Unido”. En esa conversación sostuvo: “Yo no estoy en el grupo pero contá conmigo para la actividad bala, tengo unas ganas de usar mi 9 mm”.

Ese día, en otra actividad virtual, Morel insistía con la idea de matar a los manifestantes que apoyaban a CFK en los alrededores de su casa y a la noche, Fernando Sabag Montiel hacía su primer intento de asesinato, pero no se animó. Volvería a la carga el 1 de septiembre. 

ataqueataque a CFKataque a CristinaCABACfkCristina Fernández de Kichnerintento de magnicidiomagnicidioRevolución Federal