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Gatillo Fácil | Comienza el juicio por el crimen de Lucas González

Están imputados por el homicidio el inspector Gabriel Alejandro Issasi, el oficial mayor Fabián Andrés López y el oficial Juan José Nieva, quienes se encuentran actualmente detenidos. Otro 11 están acusados de las torturas contra los amigos de la víctima.

14 efectivos de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires comenzarán a ser juzgados el próximo jueves. Tres de ellos por el asesinato del adolescente Lucas González y los otros once por las torturas cometidas contra tres amigos de la víctima y el encubrimiento del crimen. Puntualmente estos últimos intentaron hacer pasar el asesinato como una persecución de delincuentes. El hecho ocurrió el 17 de noviembre del año 2021 en el barrio porteño de Barracas.

“Lo que hicieron con nuestras vidas estas basuras es imperdonable, nos arruinaron por completo. Vamos a buscar justicia, no venganza”, dijo el papá de Lucas, Héctor González, en la previa al debate oral por el crimen de su hijo.

El inicio del debate está previsto para el jueves, a partir de las 16:00 en Comodoro Py 2002, del barrio porteño de Retiro. Se estima que se extenderá hasta julio, ya que se realizarán en total 11 audiencias, a razón de una por semana.

El desarrollo del juicio oral estará a cargo del Tribunal Oral en lo Criminal N°25, integrado por los jueces Ana Dieta de Herrero, Daniel Navarro y Marcelo Bartumeu Romero, mientras que el fiscal del debate será Guillermo Pérez de la Fuente.

En la primera jornada, está prevista la lectura de requerimiento de elevación a juicio y las indagatorias a los imputados, quienes podrán declarar en ese momento o en cualquier otro a lo largo del debate.

Tras ello, declararán Joaquín Zúñiga, Julián Salas y Niven Huanca, los tres amigos de Lucas que fueron víctimas de torturas por parte de integrantes de la fuerza. También se espera para la primera jornada el testimonio del padre de Lucas.

Acusados del crimen, intento de asesinato y encubrimiento

Los principales imputados son integrantes de la División Brigadas y Sumarios de la Comuna 4 de la Policía de la Ciudad. Se trata del inspector Gabriel Alejandro Issasi (42), el oficial mayor Fabián Andrés López (48) y el oficial Juan José Nieva (37).

A los tres se los considera coautores de los delitos de homicidio agravado por haber sido cometido con alevosía, por placer, por odio racial, por el concurso premeditado de dos o más personas y por cometerse abusando de su función o cargo por un miembro de una fuerza policial”.

Además, por el intento de asesinato de los amigos de Lucas, se los acusa de “tres tentativas de homicidio agravado por las mismas causales; falsedad ideológica y privación ilegal de la libertad agravada por abuso funcional y sin previsión de la ley”.

El resto de los imputados son el comisario inspector del Departamento Comunal Vecinal 4 Daniel Alberto Santana (43); el comisario de la Comuna Vecinal 4A, Rodolfo Alejandro Ozán (54); de la Comisaría Vecinal 4D, el comisario Fabián Alberto Du Santos (52); el comisario de la Comuna 4D, Ramón Jesús Chocobar (48); de la División Sumarios y Brigadas de la Comuna 4, el comisario Juan Horacio Romero (51) y el subcomisario Roberto Orlando Inca (47); el principal de la Comuna 4D, Héctor Claudio Cuevas (50); y los oficiales de la Comisaría Vecinal 4D Sebastián Jorge Baidón (28), Jonathan Alexis Martínez (35), Ángel Darío Arévalos (34) y Daniel Rubén Espinosa (33).

A todos se los considera coautores de los delitos “falsedad ideológica, privación ilegal de la libertad agravada por abuso funcional y sin previsión de la ley, encubrimiento agravado por la condición de funcionarios públicos y por ser el delito precedente especialmente grave e imposición de torturas”.

El crimen de Lucas González

El crimen de Lucas sucedió cerca de las 09:30 de la noche aquel 17 de noviembre. La víctima y tres amigos de su misma edad salieron de entrenar en el club Barracas Central a bordo del vehículo de uno de sus padres, cuando fueron interceptados por un auto de la brigada de investigaciones de la Policía de la Ciudad, sin patente ni señales de ser policial.

Los jóvenes se sintieron en peligro y creyeron que iban a robarles, así que huyeron del lugar. Momento en el cual los policías les dispararon desde varios ángulos. Al menos cinco tiros dieron en el auto y uno de ellos impactó en la cabeza de Lucas, quien horas más tarde murió.

 

Con información de Télam

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