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Condenaron a la Mole Moli por violencia de género pero no irá preso

La Justicia de Córdoba sentenció al exboxeador en la causa que le inició Marta Galiano, la madre de sus hijos mayores, pero fue absuelto de dos de los tres delitos.

Este lunes se llevó adelante la última audiencia del juicio por violencia de género en contra del exboxeador Fabio “La Mole” Moli. Después del mediodía, la Cámara N°12 dió a conocer la sentencia contra el exdeportista: dos años y dos meses de prisión de manera condicional por el delito de coacción.

Sin embargo, Moli fue absuelto por los delitos de lesiones leves por prescripción, y violación de domicilio por beneficio de la duda. De esta manera, el imputado no quedará detenido.

Este veredicto llega luego de una larga batalla legal en la que Marta Galeano, su ex pareja, ha defendido su posición y ha hecho valer sus derechos. La acusación incluye episodios de violencia física y emocional que, según ella, formaron parte de su relación con el hombre.

Por su parte, el exboxeador aceptó los cargos y expresó su conformidad con la sentencia. “Ya se terminó, ya se acabó. Me voy a mi casa a seguir laburando porque tengo que mantener a mi familia. Ustedes ya escucharon lo que dije. Completamente de acuerdo con la sentencia”, declaró ante los medios tras conocer la decisión.

Horas más tardes, en diálogo con Intrusos, el hombre habló sobre su relación con Marta y su familia. “Hace cuatro años estaba todo bien, todo bárbaro, seguíamos en contacto, tomábamos mate y conversábamos. Ella va a seguir siendo la negra que amé. Me voy a quedar con las cosas hermosas y bonitas de ella”, aseguró.

“Ella también sabe que, de la denuncia hace cuatro años, nunca la deje y siempre la tuve para pagar todo lo que hacía falta y necesitó”, agregó. 

En esta línea, el exboxeador dejó entrever una interna familiar y aseguró que se ofreció a llevar a su expareja el día del juicio, pero que se habría negado. Al llegar al tribunal, la mujer dio una entrevista y señaló que sus hijos fueron con Fabio.

“No me pegaba cachetadas, fue a puños cerrado, con trompadas, en la cabeza o en los brazos”

Por otro lado, su exesposa y denunciante en la causa, había manifestado días atrás que su pareja era sumamente violento cuando se alcoholizaba.

“Yo viví violencia con él. Cuando nosotros nos juntamos, él tomaba alcohol y no sé si le afectaba o no, pero era violento. Después de que yo hice la denuncia, hubo una restricción y volvió a la casa. Me echaba la culpa de haberlo dejado sin trabajo, me decía que había perdido todo por culpa mía. Todo era yo, él nunca se hizo cargo de nada. Siempre era lo mismo”, relató Galiano en diálogo con Florencia de la V.

Los golpes comenzaron cuando me decía que Marina no era su hija. Me vivía pegando para que yo le dijera quién era el padre de mi hija. Yo no vivía alcoholizada, sino que para estar aguantando trompadas, me tomaba un vaso de vino”, recordó.

No me pegaba cachetadas, fue a puños cerrado, con trompadas, en la cabeza o en los brazos”, describió la mujer, muy conmovida al tener que recordar estas situaciones de extrema violencia de las cuáles resultó siendo rehén.

Prisión en suspenso

La prisión en suspenso se debió a que lo encontraron culpable por el delito de coacción en el marco de la causa por violencia de género, y que el fiscal Mariano Antuña había pedido una de dos años y ocho meses. Es decir, seis meses menor a la dictaminada, pero que no superaba los tres años para que purgue la pena encerrado.

Sin embargo, quedó absuelto por la acusación de violación de domicilio y las denuncias que recibió por lesiones leves prescribieron, con lo cual, Fabio deberá extremar sus recaudos para no cometer delitos que puedan llevarlo a cumplir la condena efectiva tras el juicio con la Negra Marta Galiano.

“Para mí es poco”, se resignó la madre de los hijos mayores del exboxeador en un móvil con Desayuno Americano desde su casa de Córdoba.

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