“Yo la maté, le arruiné la vida“, confirmó el femicida de Catalina

Daniel Néstor Aguilar Soto confesó ante el fiscal José Mana que asesinó a Catalina Gutiérrez, una estudiante e influencer de 21 años de Córdoba. Esta información la confirmó su abogado, Gastón Schönfeld, quien indicó que el testimonio fue breve.

El joven enfrenta cargos por homicidio calificado por alevosía y por ser un caso de violencia de género. Cabe destacar que la semana pasada, había rechazado someterse a una evaluación psicológica bajo el consejo de sus defensores.

“Yo la maté, le arruiné la vida, me arruiné la vida, arruiné la vida de nuestras familias y estoy muy arrepentido“, declaró Soto, quien era un amigo cercano de la víctima. Sin embargo, no respondió preguntas. Además, Schönfeld mencionó que ahora comenzarán a analizar las pruebas.

Tras su declaración, Soto salió de la oficina del fiscal. Según su abogado, recientemente lo trasladaron a un pabellón en la cárcel Reverendo Francisco Luchesse de Córdoba, donde se encuentra con reclusos de menor peligrosidad.

Si en el juicio se lo declara culpable del asesinato, podría enfrentarse a una pena de prisión perpetua. Sin embargo, Schönfeld aseguró que su cliente no admitió haber cometido el asesinato ni mencionó que Catalina era «el amor de su vida» frente a las autoridades. Las pruebas tecnológicas y los testimonios de personas cercanas a ambos jugarán un papel crucial en el esclarecimiento del caso.

Con su confesión sobre el brutal femicidio de Catalina Gutiérrez, que ocurrió el 17 de julio en el coche de la víctima, la declaración de Soto adquiere relevancia judicial, lo que lo coloca en una posición más comprometedora.

Actualmente, las investigaciones buscan determinar si actuó solo o si hubo más involucrados en el crimen. La autopsia reveló que Catalina falleció por asfixia por estrangulamiento y había sido golpeada por su agresor, quien intentó sin éxito incendiar el vehículo.

Una primera hipótesis y las pruebas

La fiscalía gira en torno a una “obsesión” del presunto asesino con la joven y plantea que la influencer llegó a la casa de Soto y allí discutieron. Él la habría golpeado salvajemente y luego la estranguló hasta matarla. Los motivos de la pelea aún son desconocidos.

De todas maneras, todas las pruebas que logró recolectar la Justicia señalan a Aguilar Soto como el único sospechoso. Igualmente todavía no se descarta la participación de terceros.

En el domicilio del joven, encontraron un anillo de la víctima, pelos rubios y ropa húmeda dentro del lavarropas, que darían la pauta de que el joven intentaba borrar elementos en su contra. Estas pruebas se suman a las de las cámaras de seguridad ubicadas frente a su domicilio que lo captaron cuando cargaba el cuerpo sin vida de la joven y lo escondía en el asiento trasero del auto.

Ahora, la Justicia avanza con las pericias realizadas sobre los celulares de Schönfeld del imputado y Gutiérrez, puesto que intentan esclarecer cómo era el vínculo entre ambos. De igual forma, gracias a las palabras de la familia de Catalina se sabe que integraban el mismo grupo de amigos de la universidad y que, en más de un oportunidad, el detenido había ido a la casa de la víctima como invitado.