Jueces sancionados por un fallo que criminalizaba un aborto por violación

El Consejo de la Magistratura sancionó esta semana a dos jueces del Tribunal Oral N°8, Javier Anzoátegui y Luis María Rizzi, con el descuento de la mitad de su sueldo por sus comentarios misóginos y machista en varios fallos emitidos. Durante 2020, los jueces calificaron a la interrupción voluntaria del embarazo como un “método de tortura de la mafia” o como “ritual de tribus antropófagas”, en una causa por violación a una adolescente de 14 años cometida por su hermano.

A pesar que la adolescente eligió someterse a un aborto, por un abuso intrafamiliar, los magistrados consideraron ilegal el hecho, a pesar de que se aplicó el protocolo correspondiente en el marco de la Ley 27.610. La criminalización luego se intentó extender hacia los profesionales de la salud que habían garantizado la práctica legal.

Finalmente, el Consejo de la Magistratura consideró que ambos funcionarios cometieron “actos ofensivos al decoro de la función judicial, el respeto a las instituciones democráticas y los derechos humanos o que comprometan la dignidad del cargo”. La sanción fue aprobada con 18 votos.

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El tribunal también había denominado “manual de salvajadas inhumanas” al Protocolo para la Atención Integral de las Personas con Derecho a la Interrupción Legal del Embarazo.

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Los jueces Javier Anzoátegui y Luis María Rizzi tienen otras denuncias en el Consejo de la Magistratura. Por ejemplo, no contemplan el agravante del femicidio como constitucional. Si tienen que jugar un femicidio, lo tratan como un homicidio. Además, hay otra denuncia que tiene que ver con la identidad de género en las personas que se perciben mujeres. Ellos las nombran con el nombre masculino y no con el femenino.

El destino de la multa será dirigido a la víctima como una medida reparatoria. Este hecho marca un antes y un después ya que deja en el foco de la discusión al poder y deber que tienen los jueces como funcionarios públicos.