Este jueves la vicepresidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, participó de la entrega de Tablets que encabezó el gobernador bonaerense, Axel Kicillof.
En el cierre del acto llamó a la dirigencia a «discutir en serio a través de propuestas y de políticas». Apuntó a los responsables de la deuda con el FMI y señaló «que la política es representar intereses de las grandes mayorías nacionales».
«Hoy estamos en condiciones los argentinos y argentinas de poder sopesar las políticas que nos han dado resultado, más allá de la afinidad partidaria. Creo que en el 2015 éramos más felices, no teníamos este endeudamiento feroz que constituye una restricción tremenda, sin precedentes», agregó.
Asimismo, repasó las políticas que tuvo su Gobierno y el de Néstor Kirchner. Hizo especial hincapié en la ayuda social y educativa y el efecto de Mauricio Macri en el gobierno. Según apuntó, la desactivación del macrismo hizo que se perdiera una oportunidad en el desarrollo.
Por otro lado, reivindicó el plan Conectar Igualdad, programa lanzado durante su gobierno. «Los derechos universales siempre dan resultado» sostuvo. Y, tras criticar la discontinuidad del programa durante la gestión de Macri, advirtió que «si hubiéramos continuado con el plan Conectar Igualdad, qué diferente hubiese sido el problema de las clases presenciales». Y cerró: «hubiera habido todo un ejercicio de conectividad».
Por último, al referirse a la pandemia Cristina Fernández señaló: «tengo la perspectiva que cuando esta pandemia termine, los poderosos van a ser más poderosos y los débiles vamos a ser más débiles. Y los ricos van a ser más ricos y los pobres van a ser más pobres. Tenemos, por responsabilidad histórica, por convicción personal y por representación popular, que abordar este debate con todos los argentinos. Piensen como piensen y estén donde estén.»