En el marco de la «Semana de la Música», desde El Numeral nos propusimos visibilizar a grandes artistas locales. En esta oportunidad, conversamos con una joven quilmeña que desde muy pequeña se acercó la música y tiene un gran potencial para llegar lejos. Hoy es el turno de Antonella Soledad Restucci, de 18 años.
¿Cómo fue tu primer acercamiento con la música?
Partiendo de la base de que abajo de mi pieza había una sala de ensayo, que era la sala de ensayo de mi papá, y bueno, ensayaban bastante seguido:
Me acuerdo de mis primeras experiencias escuchándolos en CDS y esas cosas y era impresionante para mí. Sentía una conexión enorme con lo que estaba pasando ahí, con esos sonidos. Me acuerdo y todavía me emociono porque dije, “qué locura es la música, es algo bellísimo”. Supongo que en ese momento no dije eso, lo pienso ahora. Pero mi primer acercamiento fue desde muy muy chica.
¿Por qué haces música?
Hago música en principio porque es como algo involuntario. A veces me doy cuenta y estoy cantando, o estoy haciendo alguna melodía, o estoy tocando algo.
Es algo que lo hago todo el tiempo y lo hago de manera un poco más seria, primeramente, porque me gusta expresarme. Es un canal de expresión muy grande para mí. Deposito muchas cosas ya sea tocando canciones de otras personas o canciones mías. Y a la composición la utilizaba y la utilizo también como un canal emocional, y en parte como una herramienta de manifestación que quizás a veces no es tan explícita, pero yo intento dejar ciertos mensajes que me parecen que son importantes.
¿Qué rol tiene tu papá en tu formación musical? ¿Cómo es trabajar con él?
Mi papá tiene un rol fundamental porque él fue el que, quizás, insistió a que le preste más atención como una actividad para mí. Quiero decir, no solo como una oyente que ya disfrutaba mucho siendo solo oyente, sino que empezó a inculcar determinados géneros y artistas que sigo escuchando y que sigo profundizando en sus obras al día de hoy. Y después me motivó a empezar a formarme musicalmente, tomar clases de canto, de guitarra. Y hoy compartimos un grupo musical. Cuando me presento, generalmente toco con la banda, y él es uno de lo que conforman esa banda. Y es bastante cómodo trabajar con él porque se disfruta mucho.
Es un músico que yo admiro muchísimo y siempre está. Siempre te está haciendo el aguante, siempre está laburando por la música y por las canciones. Y diferenciamos bastante el rol quizás al momento de tocar, después volvemos a ser padre e hija y nos llevamos bien, pero al momento de tocar es como que tomamos una relación quizás más profesional. Decimos ‘bueno estamos acá laburando y generando’ y dejamos de lado cualquier otra circunstancia. Incluso hemos ido a tocar quizás un poco distanciados y cuando nos tocó estar ahí todo eso se pasa, se olvida. Tocar en familia es algo hermoso.
¿Te consideras autodidacta o tuviste/tenés formación académica?
Con la guitarra soy autodidacta porque tomé clases un mes y después continué yo investigando y viendo qué podía hacer y la verdad que me defiendo. No seré «la guitarrista», pero me defiendo tocando. Ya hace 6 años o un poquito más que toco la guitarra y es un instrumento que me encanta porque es una gran compañera y también es otro canal de expresarme más allá del canto. Y con respecto al canto, tomé clases desde los diez años hasta los trece años más o menos. También estuve en Bellas Artes estudiando música unos dos, tres años.
En Quilmes, ¿Cómo ves la escena musical?
En Quilmes hay una movida musical muy linda y viene avanzando. Se viene gestando en distintos espacios donde uno puede ir a tocar. Y generalmente son los espacios en dónde hay otros artistas que están comprometidos con la organización, entonces se generan espacios muy lindos dónde se disfruta de ir a tocar, dónde se valora también el arte y eso es algo muy importante. Que se valore el trabajo, que se valore la autogestión porque son muchas horas las que uno dedica a sus proyectos. Está lleno de artistas que hacen cosas bellísimas. Vas escuchando quizás los lanzamientos,} o vas buscando y te encontrás con un montón de música hermosa. Son increíbles las cosas que surgen de acá de Quilmes, es muy lindo.
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¿Cuáles son tus referencias? ¿Qué artistas te inspiraron para dedicarte a la música?
Un gran referente, que creo que es referente de muchos, muchas, muches, es el Flaco Spinetta. Siempre que lo escucho por mucho tiempo me inspiro, después me aburro y lo dejo. No es que me aburro, es que ya no puedo escucharlo más y lo dejo a un costado. Después vuelvo y otra vez me despierta un montón de emociones. Así que él es un gran referente musical porque va y juega dentro de un montón de géneros, o sea está dentro del palo del rock, pero no se queda en algo cuadrado, en una sola cosa. Él jugaba entre un montón de otros géneros, tomaba prestadas un montón de cositas que me parecen geniales y es él mi gran referente musical.
¿Cómo es el proceso de creación al momento de componer? ¿Qué aparece primero, la letra o la música?
Bueno, el proceso de composición varía mucho. En un principio era buscar acordes en la guitarra y después escribir en base a eso alguna letra, e ir buscando la melodía. Ahora, últimamente, primero escribo algo en formato medio poesía y después le voy buscando la vuelta con la guitarra o a veces con el piano. También intento darme maña con el piano y así mi proceso.
De tu repertorio, ¿Cuál es tu canción favorita?
De mi repertorio mi canción favorita se llama Malos Tiempos. Ahora en este momento esa es mi canción favorita, va siempre cambiando, pero en este momento es esa. Y la pueden encontrar, no la grabé todavía, pero está en una sesión en vivo que hicimos en una cuenta que se llama Resistiendo ETCt (Resistiendo en tu cara). Eso lo grabamos en la pandemia y es el único material que tengo en donde aparece esa canción.
¿Tenes proyectos a futuro?
Sí, a futuro tengo muchos proyectos en mente, muchos planes. Como futuro cercano pretendo seguir sacando canciones, quizás por separado a manera de sencillo y más tirando a fin de año me encantaría sacar un EP o un disco con algunas canciones que ya vengo laburando. También quiero seguir tocando, tocar en dónde pueda e intentar recorrer lugares en base a la música.
¿Qué crees que hace falta cambiar en el ambiente musical?
Y si hay algo que modificar en el ambiente de la música, no es la relación entre artistas, ni mucho menos; sino el valor que se le da a nuestro trabajo por parte de los espacios y de las personas que eligen contratarnos. Porque, así como te encontrás con un montón de gente que es justa en ese sentido, hay otros que siempre quieren tirar abajo a los músicos y las músicas y nosotros invertimos muchísimo en equipos, en nuestras herramientas de trabajo, en los instrumentos. Laburamos también un montón por los proyectos, son muchas horas que se le dedican y no suele ser bien retribuido. Entonces ese me parece un factor muy importante a modificar, porque bueno, trabajo es trabajo y se tiene que valorar tanto si sus artista o en cualquier otro ámbito.
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