Conocemos la difícil situación económica que estamos viviendo todos en mayor o menor medida y sabemos que los índices de inflación no paran de subir. Sin embargo, no nos damos cuenta de todos nuestros privilegios hasta que nos topamos con una situación como esta, que nos hace dimensionar la realidad que habitan muchos en el país.
Fue en San Luis, donde un hombre, con dos pequeñas a su cuidado, y sin los medios económicos para pagar las facturas mensuales, dejó un cartel pegado en el medidor ubicado en el exterior de su hogar, con la esperanza de que alguna persona se apiade de su situación.
Ante la desesperación de que le corten la luz expresó: “Por favor, no me corten la luz. Me quedé sin trabajo, estoy solo con mis dos hijas. En cuanto pueda, voy a pagar la luz. Por favor y gracias”.
Quien leyó el mensaje fue Xavier Rubilar, de la empresa Edesal, quien visitaba como todos los días a los usuarios para entregarles los recibos de cobro y leer los nuevos consumos en los medidores.
Al leer el comunicado, Rubilar empatizó con el hombre y rápidamente sacó una foto para luego pedir ayuda. Así se inició una campaña solidaria para ayudar al desconocido.