Miles de personas cubrieron las calles porteñas de Buenos Aires para celebrar la 31° Marcha del Orgullo Nacional. Cómo es habitual para el colectivo, una vez más con mucho color, música y fiesta se reclamó por un paquete de políticas públicas que garanticen una mejor calidad de vida para la comunidad LGBTIQ+ (Lesbiana, Gay, Bisexual, Travesti, Transexual, Transgénero, Intersex y Queer).
Principalmente para personas travestis y trans que continúan con una expectativa de vida menor a los 40 años, es decir, la mitad de lo que se espera que viva una persona cisgénero.
Además, este año hubo gran cantidad de carrozas o “camionas”, como las llamaban en la movilización, en representación de organizaciones, ONG, fiestas y marcas que marcaron en caravana la ruta y acompañaron a los miles de manifestantes que bailaban camino al Congreso de la Nación, donde se cerró el acto con la participación de artistas reconocidos por nuestra cultura, entre ellos Sandra Mihanovich y Pablo Ruiz.
La consigna principal de este año fue “La deuda es con nosotres” y entre los reclamos más escuchados se encontraban: Ley Integral Trans, Ley Antidiscriminatoria, sí al lenguaje inclusivo, aparición con vida de Tehuel de la Torre, implementación efectiva de la ESI y aplicación de la Ley de Cupo Laboral Travesti Trans.
Además desde el escenario se escucharon distintas críticas. Principalmente a Soledad Acuña por su campaña junto a Larreta contra el lenguaje inclusivo en las escuelas. Y luego a la ex ministra de Mujeres, Géneros y Diversidad, Elizabeth Gómez Alcorta, por los recortes de presupuesto en el área.