El Frente de Todos realizó el primer encuentro de su mesa política en una reunión que se extendió por más de cinco horas. En la sede del PJ, pasada la 1.30 de la madrugada, el presidente Alberto Fernández cerro el encuentro con un discurso titulado «Democracia sin proscripciones. Unidad para transformar».
Participaron 33 dirigentes, entre ellos el presidente Alberto Fernández, el ministro Sergio Massa y el diputado Máximo Kirchner, a quien no se esperaba.
«El mayor triunfo de los poderes concentrados es someter a la sociedad en el desánimo y en el enojo, en la frustración y el descreimiento», enfatizaron desde el FdT. Y advirtieron que en 2023 «se enfrentarán dos modelos de país».
El documento difundido fue consecuencia de un acuerdo entre todos los espacios que componen la coalición oficialistas. Entre los puntos claves se encuentra el compromiso de «disponer las acciones necesarias para impedir la proscripción de la compañera vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner».
Asimismo, y en esa línea, afirman que el «liderazgo y potencia electoral» de Cristina «no puede ser arrebato». «No debería haber ningún poder económico, mediático o judicial capaz de decidir por encima de la voluntad popular», arremetieron desde el Frente de Todos.
En otro tramo, aseguraron que «es tarea primordial de quienes formamos parte del proyecto político continuar con los esfuerzo para reducir la inflación».
También marcaron como prioridad «aumentar el poder adquisitivo de los salarios» y trabajar en políticas públicas para «que nuestra gente viva mejor». Y puntualizaron: «ese fue el contrato electoral que acordamos de cara a la sociedad en 2019».
Posteriormente advirtieron que para evitar el retorno de la derecha, «una parte fundamental de la estrategia del Frente es reforzar la unidad en la diversidad».