Doman, Grindetti y Marconi fue el trinomio que conformó la lista Unidad Independiente y que ganó las elecciones el pasado noviembre con el 71,91 % de los votos. Con la intención sacar a Hugo Moyano y poner fin a la mala dirigencia que tuvo el sindicalista, Domán y Grindetti llegaron al club con una campaña a base de 100 promesas. Su lema de gestión: sacar a Independiente del difícil momento económico y futbolístico que atraviesa.
Esto fue sólo una ilusión. Tan sólo 6 meses después y ante el desastroso desempeño futbolístico del club de Avellaneda, Fabián Doman dio un paso al costado. En las últimas horas anunció que pondría fin a su mandato por las presiones y amenazas recibidas. Tras esta decisión, los hinchas se convocaron en la sede social bajo la consigna “Que se vayan todos” para pedir la renuncia de toda la actual comisión directiva, que en este semestre no logró mejorar el nivel deportivo ni sacar a Independiente del infierno financiero que vive.
En la tarde del miércoles, el hasta ahora vicepresidente, Néstor Grindetti, anunció a través de un video que se tomará una licencia como intendente de Lanús para darle curso a su rol de presidente hasta que se resuelva de forma definitiva el conflicto con la dirigencia en el club.
Pero la pregunta es: ¿Cuál será la salida que prevé el funcionario aliado de Larreta y Macri para la institución? Las y los hinchas del Rojo temen que el camino sea uno sólo: resolver el problema financiero a través del gerenciamiento, una experiencia que ya pasó años atrás Racing Club, logrando que Néstor Grindetti pase de una gestión de abandono en Lanús a convertir a Independiente en una empresa.