Después de ser detenidos el 12 de junio mientras se debatía la Ley Bases en el Senado, la Justicia determinó la liberación de dos de los manifestantes que concurrieron al Congreso de la Nación cuando se desató la represión de las fuerzas federales. Aún quedan otras dos personas detenidas.
La decisión fue tomada por la Sala 2 de la Cámara de Apelaciones, que revocó las prisiones preventivas de David Sica, acusado de haber agredido a un policía, y Cristian Valiente, a quien habían imputado por presunta portación de una granada de gas.
En profundidad. Patricia Arredondo, acusada de incendiar las bicicletas del Gobierno de la ciudad de Buenos Aires, y Roberto de la Cruz Gómez, bajo la carátula de intimidación pública con atentado a la autoridad, continúan detenidos. Bajo esta misma figura permaneció aprehendido hasta el pasado jueves Facundo Gómez, pero fue liberado por falta de mérito.
Durante la jornada de represión, las fuerzas federales detuvieron a 33 personas, de las cuales 17 fueron liberadas en menos de 48 horas. El fiscal Carlos Stornelli fue el encargado de impulsar los cargos contra ellos, entre los que se encontraban: “lesiones, daños simples y agravados, incendio o estrago, delitos contra la seguridad pública, instigación a cometer delitos y resistencia a la autoridad”.
Del operativo implementado por el Ministerio de Seguridad de la Nación participaban, además de la Policía Federal, efectivos de Gendarmería Nacional y Prefectura Naval.
⭕ #AHORA | Conferencia de prensa en el SerPaJ por la liberación de quienes aún continúan detenidos por protestar contra la Ley Bases. Impulsando una concentración y festival en Plaza de Mayo el 12 de julio a un mes de las detenciones. pic.twitter.com/tJ9G8wzrp6
— Periodismo de Izquierda (@PeriodismoDeIzq) July 10, 2024
Esta semana, en una conferencia en el SERPAJ, integrantes de organizaciones sociales, de derechos humanos y ex detenidos actualizaron la situación de las causas judiciales por las detenciones ilegales durante y después de la represión de las protestas en las inmediaciones del Congreso de la Nación. En la rueda de prensa leyeron un documento en el que contaron lo vivido. “Tenemos claro que no fue contra nosotros”, afirmaron.
Desde el Frente de Abogadxs por los Derechos Humanos y el Socialismo (FADHUS), que representa a Patricia Calarco Arredondo, denunciaron que la mujer continúa detenida con prisión preventiva porque, de acuerdo a lo resuelto por dos jueces, “puede entorpecer la investigación”. “Ninguno explicó de qué forma podría entorpecerla, cuando ella no es una persona con poder o medios para hacerlo. Claramente, es una persecución a la gente que sale a manifestarse”, afirmó una de las abogadas.
Durante la conferencia, también se pidió por el cierre de las causas de quienes fueron liberados. “No la están pasando bien, no pueden volver a trabajar y no hay forma de que retomen una vida normal, tanto por lo económico como por lo psicológico”, sostuvieron desde FADHUS.
En esa línea, señalaron que muchos de ellos están siendo hostigados en redes sociales y en la calle por parte de la policía.
También convocaron al festival de esta tarde en Plaza de Mayo. A partir de las 15 horas tocarán distintas bandas, entre las cuales se encuentra “Julio y Agosto” de la que era parte Santiago Adano, uno de los exdetenidos.
🔥A un mes de las detenciones: CONCENTRACIÓN Y FESTIVAL SOLIDARIO
🔺 Libertad a lxs detenidxs de la Ley Bases.
🔺 Cierre de las causas.
🔺 Defensa de los Espacios de la Memoria.✊🏼 Hablarán familiares y ex detenidxs.
🗓️ VIERNES 12 DE JULIO
📍 PLAZA DE MAYO de 15 a 19.30 horas. pic.twitter.com/YofAC6M1kR— CORREPI (@CORREPI) July 9, 2024
“Nos detuvieron ilegalmente, mediante acusaciones falsas y violencia brutal de la policía, con patadas, palazos y balas de goma en algunos casos. Nos llevaron a distintas comisarías y alcaldías sin decir en ningún momento cuál era la causa de detención, sin poder hablar con un abogado/a, sin poder usar los celulares, sin ver a ningún familiar, mucho menos a un médico. Desoyendo pedidos de Habeas Corpus, vulnerando nuestros derechos más básicos”, sostuvieron algunos de los ex detenidos en la conferencia.
“Las mujeres estuvimos 15 horas en una camioneta y pasamos la noche ahí esposadas, para luego pasar el segundo día en el pasillo de una comisaría sin agua y donde la policía no nos dio ni un plato de comida. Cuando la causa pasó a fuero federal, nos trasladaron a la Unidad N°29 en el edificio de Comodoro Py, nos desnudaron una por una en una celda a puertas abiertas donde había tránsito de gente, en lo que fue una situación de humillación más para nosotras. Las que no fuimos excarceladas el viernes 14, terminamos en el Complejo Penitenciario de Mujeres de Ezeiza”, agregaron.
“Los varones fueron a tres cárceles de máxima seguridad: Devoto, Ezeiza y Marcos Paz. Algunos fueron puestos contra una pared y les tiraron gas pimienta en la cara. Convivimos con ratas, cables de electricidad sueltos en habitaciones inundadas habiendo riesgo de quedar electrocutados. En todo momento, tanto en las comisarias como en los penales, se nos preguntaba insistentemente si formábamos parte de alguna agrupación política, que habíamos hecho o si tirábamos piedras, lo que constituye interrogatorios extrajudiciales que las fuerzas de seguridad tienen prohibido por ley hacer”, destacaron.
Además, las y los liberados presentes destacaron la situación de ilegalidad de todas las detenciones y el contexto de violencia institucional por el que pasaron. “Creemos que tiene que ver directamente con una estrategia política de este gobierno, que no somos los primeros, ni vamos a ser los últimos. Nos preocupa ver como la criminalización de la protesta está en escalada. Al mismo tiempo que aumenta la represión, nos entristece ver como vacían los espacios de memoria y de DDHH tan necesarios para nuestra historia y el fortalecimiento de la democracia”, agregaron.
Incluso, le dedicaron unos minutos a la estigmatización que continúan sufriendo hoy en día y que les deja grandes secuelas. “Desde que nos llamen terroristas que queríamos hacer un golpe de Estado hasta la privación de la libertad que aún continua en 4 casos”.
“Muchos de nosotros sufrimos persecución policial, política, laboral y mediática. Nos han amenazado y hostigado por redes sociales. Nos ha parado la policía para verdugearnos y hacernos requisa solo por mostrar el DNI. Muchos estamos con estrés post traumático que nos impide hacer nuestra vida normal, por lo que les pedimos que nos sigan acompañando hasta que se cierre este armado judicial. Creemos que somos un ejemplo para mostrarle al pueblo que seas quien seas, hagas lo que hagas, si vas a protestar contra las políticas de hambre de este gobierno, sos un terrorista que puede terminar en un penal de máxima seguridad sin siquiera estar procesado. Tenemos claro que no fue contra nosotros, sino contra todos los que quieren seguir viviendo en libertad y democracia”, concluyeron.