Intimaron a La Libertad Avanza por entregar menos boletas

"La ausencia de boletas de esa alianza, en las distintas mesas electorales, será su exclusiva responsabilidad", expresó la Junta Electoral.

La Junta Nacional Electoral de la Ciudad de Buenos Aires resolvió que, ante la menor cantidad de boletas entregadas para la segunda vuelta por parte de La Libertad Avanza, la alianza será la responsable si llegara a haber faltantes.

En medio de denuncias de «fraude anticipado», una conducta común de las nuevas derechas de Latino América, referentes de La Libertad Avanza habían anticipado que entregaron menos boletas a la Justicia Electoral porque reforzaron la entrega a los fiscales.

La JNE aseguró que «encontrándose vencido el plazo establecido y no habiendo la Alianza en cuestión entregado una mayor cantidad de boletas, dicha situación no favorecerá el mejor desarrollo del comicio«. Además, alertaron que «el eventual faltante de boletas no exime a la alianza de la responsabilidad de su reposición y distribución».

Ante el incumplimiento de la intimación para que entreguen más boletas, solicita que «en 24 horas informe expresamente a la Junta cuál será el procedimiento a seguir». De no responder, la ausencia de boletas en las distintas mesas electorales será exclusiva responsabilidad de La Libertad Avanza.

El monto que entregaron alcanzaría a cubrir las «expectativas de voto de 100 a 150 electorales por mesa, sobre un padrón de 350 electorales». Sin embargo, destacan que la Junta extremará los recaudos necesarios.

Especulación y ¿fraude electoral?

En una reciente entrevista, grabada ante el conductor peruano Jaime Bayly, Javier Milei afirmó que las elecciones del pasado 22 de octubre no fueron limpias, aunque no realizó ninguna presentación judicial al respecto. “Hubo irregularidades de tal magnitud que podemos decir que fue fraude”, señaló en esa ocasión.

El mismo 22, la Justicia se vio obligada a pronunciarse sobre cuáles son los canales legales para denunciar irregularidades.

El “fraude preventivo” lo utilizó la oposición boliviana en 2019 y Trump en EEUU en 2020. Bolsonaro en Brasil es otro ejemplo. De esa manera, si ganan, “vencieron al fraude” y, si pierden, deslegitiman el triunfo de sus oponentes y su futuro gobierno.

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