Brasil abandonó la CELAC
Ayer Brasil salió de la CELAC porque indican que el organismo no tiene condiciones para actuar en el contexto de crisis regional. Detrás se esconden otros motivos.
La CELAC
El organismo fue fundado en 2011 por 33 países de América Latina y el Caribe. La idea inicial fue constituir una suerte de OEA sin incluir a Canadá ni a Estados Unidos.
La activa participación de Cuba y el arduo trabajo del entonces presidente Hugo Chávez fueron vitales para la entidad.
El proyecto de unidad
Luego de su asunción, Alberto Fernández planteó que era necesario un proyecto de integración latinoamericana. Junto al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, buscaron reflotar la organización. Tras la ruptura de la Unasur, era fundamental un espacio donde se pudieran discutir los asuntos que le conciernen al conjunto de países.
Con el presidente @lopezobrador_ compartimos la misma visión sobre los desafíos que América Latina enfrenta. Ambos valoramos la institucionalidad y la democracia tanto como la igualdad y la equidad.
Le agradezco su generosidad y compromiso. Tenemos muchas cosas por hacer juntos. pic.twitter.com/o1TIi9Qbnu
— Alberto Fernández (@alferdez) November 5, 2019
Una semana atrás se celebró la cumbre 2020 y México asumió la presidencia pro tempore del organismo. La mayoría de los integrantes enviaron representantes al evento. Los ausentes fueron República Dominicana, Bolivia, Trinidad y Tobago y Brasil. Bolivia continúa bajo un régimen de golpe de Estado y su presidenta dista completamente de estar de acuerdo con la política de la CELAC. Brasil posee una posición política similar.
El diario Folha de Sao Paulo, informó que Marcelo Ebrand, canciller mexicano, contactó previo a la cumbre a su par brasileño Ernesto Araújo. Le solicitó que participara del evento pero recibió un comunicado que planteaba que Brasil declinaba la invitación.
Brasil y los organismos regionales
El año pasado Brasil tampoco participó de la cumbre cuando Evo Morales asumió como presidente pro tempore. Las diferencias políticas de Jair Bolsonaro y el entonces mandatario boliviano fueron la razón de su ausencia.
Ernesto Araujo planteó en varias ocasiones que «existe un horizonte comunista que busca estrangular a Brasil». Estas declaraciones vienen de la mano del fuerte antagonismo político entre el gobierno brasileño y varios de los países de la región. Bajo esta idea abandonó también la UNASUR en abril de 2019. Los argumentos se basaron en que el organismo creado por Chávez era una forma de la izquierda para ejercer el poder.
Brasil continúa marcando una firme posición respecto de la unidad latinoamericana. En medio de un continente que se sacude entre crisis, un golpe de Estado e intentos de recomponer la situación regional, Bolsonaro no hace más que romper con todo aquello que le desagrada. Se aísla cada vez más y genera cada vez más cuestionamientos.
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