Fernando tenía ADN de Cinalli en un dedo meñique

En el marco de la octava audiencia por el crimen de Fernando Báez Sosa, un perito afirmó que el dedo meñique izquierdo de la víctima tenía rastros de ADN compatibles con el perfil genético de Blas Cinalli, uno de los ocho imputados.

Se trata de César Guida, responsable de analizar las muestras de sangre de la ropa de los acusados. Frente al Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 1 de Dolores, añadió que las zapatillas de Máximo Thomsen y la camisa de Matías Benicelli registraban ADN de Fernando.

En esa línea, una efectivo de la Policía Científica afirmó que ambas zapatillas de Thomsen presentaban «presunto tejido humano». 

Al cierre de las declaraciones, el abogado Fernando Burlando le leyó a la perito Graciela Parodi el acta de procedimiento del peritaje. Allí se mencionaban dos manchas rojizas en un jean de Ciro Pertossi. Ella confirmó que ella había escrito el acta, aunque no precisó ningún nombre más.

Sobre la zapatilla derecha del imputado, Norma Beatriz Tramontini, del Laboratorio Químico de la Policía Departamental de Dolores, confirmó que el análisis dio positivo para sangre humana.

También explicó que se analizaron más de 30 muestras de las prendas incautadas arrojaron resultados positivos para sangre.

“Ver la mancha de sangre en la ropa de los imputados duele”

Tras finalizar la octava jornada, en la que se halló el ADN de Cinalli en un dedo de Fernando y manchas de sangre en la ropa de los imputados, los padres hablaron con la prensa. En la puerta de los Tribunales de Dolores afirmaron que quieren “justicia”.

“Ver la mancha de sangre que quedó en la ropa de los imputados por tantos golpes que le dieron, duele”, dijo Silvino Báez, papá de la víctima.

Además, Graciela, su mamá, añadió: “siento que estamos cerca de la justicia, las pruebas son contundentes”. Y aseguró: “Yo no vengo a buscar venganza, vengo a buscar justicia”.

Con información de Télam