El Gobierno anunció que las Fuerzas Armadas custodiarán la seguridad interior
En un acto realizado en el área militar de Campo de Mayo, en la localidad bonaerense de San Miguel, el presidente Mauricio Macri anunció, por medio de dos decretos, la integración de las Fuerzas Armadas a las tareas de seguridad interior y refuerzo de las fronteras con el fin de continuar en “la lucha contra el narcotráfico y el terrorismo”.
Esta reforma de las atribuciones y obligaciones de las Fuerzas Armadas se publicará a partir de mañana en el Boletín Oficial y dispone de un despliegue de 10 mil militares para apoyar logísticamente a las fuerzas de seguridad en la lucha contra el narcotráfico.
“Queremos saldar la deuda que tenemos con las Fuerzas Armadas de la democracia”, sostuvo Macri en compañía del ministro de Defensa Oscar Aguad, y del jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, teniente general Bari del Valle Sosa. Además, agregó: “Los argentinos vivimos en una zona de paz y estabilidad, pero somos parte del mundo complejo donde las amenazas requieren una coordinación y articulación eficiente”, en relación a la reconversión de tareas que dispuso por decreto y sin consenso, ya que para eso debió revocar las leyes anteriores impulsadas por los presidentes Alfonsin (1988), Menem (1991) y el decreto de 2006 de Nestor Kirchner, reglamentaciones que limitaban la participación del Ejercito en cuestiones de seguridad interior y limitación del accionar militar frente presuntos ataques extranjeros.
El anuncio se realizó en el marco del acuerdo que el Gobierno llevó adelante con el FMI, que contó con la desaprobación de la totalidad del arco opositor, para ampliar el ajuste sobre las y los trabajadores, salarios, jubilaciones y derechos sociales adquiridos, situación que generó distintas manifestaciones de repudio.
Una de las voces que se alzó en contra de esta resolución catalogándola como “ilegal” fue la del diputado nacional por la provincia de Santa Fe y ex Ministro de Defensa Agustín Rossi, quien en su cuenta de Twitter afirmo: “Desde 1983 es una política de estado la separación de la defensa nacional de la seguridad interior”, y reclamó que el debate pase por el Congreso de la Nación. Finalmente, acusó a Macri de usar un argumento ilegal e ineficaz para aplacar con demagogia punitivita y militarización la crisis por el ajuste de Cambiemos.
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