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Franco Casco: absolvieron a todos policías acusados por su muerte

El fallo del Tribunal Oral Federal en lo Criminal 2 de Rosario fue por mayoría. El padre de la víctima denunció que "no hay justicia en este país" y que "a Franco lo mató la policía".

En las últimas horas, 19 policías que eran juzgados por la desaparición forzada seguida de muerte de Franco Caso, el joven bonaerense de tan solo 22 años que estuvo detenido en una comisaría en Rosario y cuyo cadáver fue encontrado tres semanas después en el Río Paraná, en 2014, fueron absueltos por un tribunal federal tras el juicio que comenzó hace más de un año y en el cual declararon más de 200 personas.

El fallo del Tribunal Oral Federal en lo Criminal 2 (TOFC) de Rosario fue por mayoría y generó un fuerte repudiado por parte de Ramón Casco, el padre de la víctima. “No hay justicia en este país, a Franco lo mató la policía, esa es la única verdad”, sostuvo.

Miembros de la Multisectorial contra la Violencia Institucional de Rosario y otros militantes acompañaron a la familia del joven durante la lectura del veredicto del juicio oral que se inició en diciembre de 2021. La sentencia dictó la absolución a los 19 policías que llegaron al juicio oral por el crimen de Franco Casco, a pesar de que la fiscalía había solicitado en su alegato condenas para 14 de ellos.

Los magistrados Eugenio Martínez y Ricardo Vázquez firmaron el fallo que dictó las absoluciones de todos los involucrados. Además ordenaron la libertad de los procesados que cumplían prisión preventiva.

Sin embargo, el presidente del tribunal, Omar Paulucci, se inclinó por la condena a prisión perpetua de tres policías por la desaparición forzada seguida de muerte. Además de la condena por encubrimiento para otro grupo de miembros de la fuerza de seguridad.

“A Franco se lo llevaron detenido, lo verduguearon, lo cagaron a palos hasta matarlo, lo tiraron al río, lo desparecieron y queremos que se haga justicia”

MULTISECTORIAL CONTRA LA VIOLENCIA INSTITUCIONAL

Uno de los abogados querellantes por la familia Casco, Salvador Vera, dijo en diálogo con los medios que evaluarán la apelación de la sentencia una vez que se conozcan los fundamentos. Esto sucederá recién el 25 de septiembre próximo.

“Vamos a hacer lo que sea necesario para que haya justicia, a Franco se lo llevaron detenido, lo verduguearon, lo cagaron a palos hasta matarlo, lo tiraron al río, lo desparecieron y queremos que se haga justicia”, dijo afuera de Tribunales, entre llantos y con inocultable bronca, una miembro del a Multisectorial Contra la Violencia Institucional.

El caso de Franco Casco

De acuerdo a la investigación, a fines de septiembre de 2014 Franco Casco había arribado en tren desde la localidad bonaerense de Florencio Varela a Rosario para visitar a unos familiares. El 6 de octubre tenía organizado la vuelta a su domicilio, pero nunca llegó y sus parientes comenzaron a buscarlo.

Según la versión policial, un vecino llamó al celular del comisario de la seccional 7ma de Rosario, Diego Álvarez, para alertarlo sobre un joven en “actitud sospechosa”, que fue demorado en la comisaría.

Los familiares de Franco lo buscaron en esa seccional pero, aparentemente por haber sido ingresado con el apellido materno, le dijeron que no había estado allí. Los policías involucrados admitieron luego que, sí lo habían detenido, pero que tras solicitarle los datos personales, el joven fue liberado.

Para el fiscal del caso, Fernando Arrigo, fundado en la autopsia y en las testimoniales de personas que la noche del 6 de octubre de 2014 estaban detenidos en la seccional, Casco fue golpeado, torturado y asesinado, por lo que se trató de un caso de violencia institucional.

Tras tres semanas de búsqueda, el cadáver del joven apareció flotando en el río Paraná.

Álvarez, Benítez, Blanco y Contino: las condenas que no fueron

En el alegato final del juicio oral, Arrigo pidió prisión perpetua para el comisario Álvarez, los agentes Walter Eduardo Benítez y Fernando Sebastián Blanco, y la agente Cecilia Rut Elisabet Contino, por desaparición forzada de persona, agravada por la muerte de la víctima e imposición de torturas seguida de muerte.

Por esos delitos y en calidad de “coautores”, solicitó igual pena para el subcomisario Enrique Nicolás Gianola Rocha; el jefe de sumarios César Daniel Acosta y los agentes Cintia Débora Greiner; Marcelo Alberto Guerrero; Guillermo Hernán Gysel; Rocío Guadalupe Hernández; Esteban Daniel Silva; Romina Anahí Díaz; Ramón José Juárez y Franco Luciano Zorzoli.

A la vez, el fiscal pidió 14 años y 10 meses de prisión e inhabilitación absoluta para los agentes Belkis Elisabet González y Rodolfo Murua, a quienes consideró partícipes secundarios de la desaparición forzada; y solicitó 5 años y 10 meses de prisión para dos efectivos de Asuntos Internos, Pablo Síscaro y Daniel Escobar. Al mismo tiempo solicitó la absolución del agente Walter Ortiz.

Por el voto mayoritario de los dos vocales, el TOFC2 de Rosario resolvió que los acusados debían ser absueltos. Aunque aún no se conocen los fundamentos de la decisión judicial.

“Un fallo vergonzoso”

Tras conocerse el fallo, la Multisectorial contra la Violencia Institucional, quién acompaño en todo momento a los familiares en el juicio, señaló en un documento que se trató de “un fallo vergonzoso para quienes deseamos vivir en una sociedad más justa, menos cruel y desigual”.

“Hoy el Tribunal Federal de Rosario garantizó la impunidad. Sorprenden las absoluciones masivas del voto mayoritario, teniendo en cuenta que un juez federal, un fiscal federal, una Cámara de Apelaciones y la Cámara de Casación vio otra cosa en instancias anteriores”, agregó.

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