Es Tuyo, del Barrio, de Todes

Guatemala sancionó una ley que avasalla derechos

El Congreso aprobó una ley que endurece las penas de cárcel para las personas que abortan, prohíbe el matrimonio igualitario y la educación sexual en las escuelas.

En el marco del Día Internacional de las Mujeres Trabajadoras, el Congreso de Guatemala sesionó y aprobó la «Ley para la Protección de la Vida y la Familia», una norma que endurece penas por aborto, prohíbe el matrimonio entre personas del mismo sexo e imposibilita la educación sobre diversidad sexual.

El texto está a la espera de que el presidente, Alejandro Giammattei, lo firme y finalmente quede promulgado. La dureza de las penas limitan la libertad de las mujeres y de la comunidad LGBTIQ+.

La ley actual aplicaba una pena máxima de tres años, la actual plantea hasta 10 años de cárcel a «la mujer que causare su aborto o consintiere que otra persona se lo cause». Además, castiga con prisión de hasta 50 años al responsable de un «aborto o de maniobras abortivas efectuadas sin consentimiento de la mujer» y que causen la muerte de ésta. Según informó la agencia de noticias AFP, es un delito considerado como un «aborto calificado».

Para el diputado Armando Castillo, del partido de derecha VIVA e impulso de la norma, esta ley es «importante para la sociedad guatemalteca». Además, cuestionó que a diferencia de su país, en otros se avanza «en la aprobación de leyes abortistas y en leyes que degeneran el concepto original de familia».

Por su parte, Lucrecia Hernández del partido Semilla (centroizquierda), cuestionó la iniciativa del Congreso porque «está criminalizando y penalizando abortos espontáneos y eso es peligroso». «Perder un embarazo es devastador y esta ley, a pesar de que una mujer pueda estar en duelo, le aplica automáticamente la etiqueta de sospechosa», detalló.

Prohíbo el matrimonio igualitario

La norma también reforma el Código Civil ya que «se prohíbe expresamente el matrimonio entre personas del mismo sexo» en Guatemala. En esa misma línea, invisibilizando a la comunidad LGBTIQ+, prohíbe promover políticas o programas que «tiendan a desviar su identidad según su sexo al nacer».

Se «prohíbe a las entidades educativas públicas y privadas promover en la niñez y adolescencias políticas o programas que tiendan a desviar su identidad según su sexo al nacer».

El peligro de esta ley es que estigmatiza y violenta las disidencias. No solo no pueden casarse, sino que no pueden acceder a información adecuada de los sistemas de educación.

«Se le están violentando derechos humanos a importantes sectores de la población. Esta ley es absolutamente discriminatoria y es una ley que incita al odio», expresó Walter Félix (partido URNG, izquierda).

Distinto a Patricia Sandoval (FCN, derecha) que defendió a ley por ser una «bendición de Dios». «No nos vengan a meter ideas tontas. Esta ley es constitucional, es viable y es bendición de Dios», argumentó.

Capital Iberoamericana antiderecho

El presidente del país, Alejandro Giammattei, declaró en su programa televisivo «En consulta con el Dr. Giammattei» que iba a declarar a Guatemala como la «Capital Iberoamericana Provida».

Este miércoles, en tiempo récord, el Congreso aprobó al 9 de febrero como el «Día de la Vida». Esta iniciativa fue previa a la sanción de la Ley de Protección.

Según explicaron desde la Secretaría de Comunicación Social de la Presidencia (Scsp), hay siete criterios que avalan a la «Capital Provida». Uno de ellos fue consecuencia de que el mandatario dijera «sí a la vida» desde la concepción.

Reacciones en redes

Si bien la iniciativa recibió apoyo, varios usuarios de Twitter se manifestaron en contra. Algunas personas alegaron falta de criterio, violencia y discriminación con el hashtag #NoALa5272.

Una de ellas fue la periodista Paola Hurtado, quien llamó «hipócrita» al país. Además, acusó que el presidente está «divorciado» y «que tiene sexo con hombres».

Otros aseguran que no es un país provida porque «si un niño de 10 años debe tener un trabajo informal, debe lustrar zapatos para ganarse el pan de cada día».

La organización de «Mujeres en Movimienta» de mujeres feministas diversas indígenas también se expresó sobre la prohibición del matrimonio igualitario.

Y hay quienes condenaron la ley porque «es un insulto» a la fe y a la razón.

 

Los comentarios están cerrados.