Miles de personas protestaron en Estados Unidos por tratos inhumanos a inmigrantes detenidos
En diversas ciudades de Estados Unidos se realizaron más de 180 protestas simultáneas frente a edificios del Gobierno federal y oficinas de legisladores pidiendo que se clausuren los centros de detención de inmigrantes que son calificados por muchos como campos de concentración.
En el día de ayer miles de personas se concentraron para exigir el cierre de los centros de detención de inmigrantes que se encuentran en condiciones totalmente inhumanas, y la liberación inmediata de quienes se encuentran recluidos en ellos.
Las manifestaciones se realizaron frente a edificios del gobierno con el objetivo de reclamar también que se cancele la entrega de fondos al gobierno para la Patrulla Fronteriza y el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas, organismos encargados de poner en práctica las políticas migratorias determinadas por el presidente Donald Trump.
Los manifestantes desplegaron carteles con frases tales como «los niños merecen cariño y no jaulas», «el amor no conoce fronteras» o «hagamos a Estados Unidos amable de nuevo», en referencia al nuevo eslogan de campaña del presidente: «Make America Great Again» (Hagamos a EE.UU. grande de nuevo).
Los manifestantes les reclamaron a los legisladores que visiten los centros de detención y sean testigos directos de lo que ocurre en estos lugares.
Este lunes el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) informó la muerte del hondureño Yimi Alexis Balderramos Torres de 30 años, quien falleció el pasado 18 de junio en Texas. Se trata del undécimo indocumentado que pierde de la vida en los últimos meses encontrándose bajo custodia federal.
En declaraciones públicas la activista Gabriela Zavala quien participó en las protestas realizadas en Brownsville, ciudad fronteriza entre Texas y México, indicó: «No podemos permitir que esto siga pasando, no entendemos por qué no se dan cuenta».
«Este es el comienzo. Es un llamado también a los votantes para que se unan y pidan una solución inmediata y vigilen las acciones de sus representantes», insistió Sandra Cordero, coordinadora del grupo Families Belong Together Coalition.
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